Los alumnos del Mestre Lluís Andreu disfrutaron ayer del carnaval infantil, en el polideportivo de Antoni Blanc y en su propio colegio.

Además de los escolares, en esta edición los padres jugaron un importante papel, ya que tuvieron que ayudar a sus hijos a preparar su disfraz. Este año se dejó plena libertad para que cada cual se disfrazara a su manera y el resultado no decepcionó. En cambio, los profesores optaron por ponerse el disfraz de superhéroe y superheroína, lo que ayudó a crear más ambiente.

La Apima del centro se encargó posteriormente de ofrecer una almuerzo, a base de coca payesa y zumos, para acabar una mañana divertida y animada. A lo largo de esta semana los colegios del Pilar de la Mola y de Sant Ferran también han organizado sus carnavales, de puertas abiertas. Mañana, a las 11 horas, la cita para la rúa de los adultos es en el aparcamiento de sa Senieta, con premios para los que se apunten al concurso, música y comida popular a las 14 horas.