Tras un espejismo de aparente imparcialidad, el mundo científico también esconde espacios plagados de actitudes misóginasmicromachismostechos de cristal situaciones de acoso. "Cobro menos que el resto de mis compañeros, aún teniendo más formación y responsabilidades que ellos", comenta una científica. "Mi carrera científica no ha avanzado a la misma velocidad que la de mis colegas varones", añade otra. "Un jefe de laboratorio me humilló por defender mis ideales feministas, tuve que abandonar el centro y por culpa de esto mi línea de investigación estuvo parada durante años", denuncia una investigadora.