El Partido Popular comienza una nueva era en Sevilla. Alberto Núñez Feijóo, que será aclamado como nuevo presidente del partido, pretende volver al PP más clásico, a aquel que le dio la victoria a José María Aznar y a Mariano Rajoy. Pablo Casado, que quiso romper con la era anterior, ha pronunciado su adiós definitivo, también entre aplausos. Durante su intervención, Casado se ha dirigido a su partido después de un mes agridulce, ha dicho, “que empezó con un sentimiento de injusticia superado pronto por el de una profunda gratitud”. El presidente en funciones del PP ha asegurado que en política es importante rendir cuentas. Casado ha concluido su intervención diciendo que “creo que ahora lo mejor es que dé un paso al lado, para dejar mi escaño en el Congreso de los Diputados y cualquier cargo de responsabilidad en el Partido Popular”, asegurando que toma esa decisión con la satisfacción del deber cumplido y con la tranquilidad de haber defendido todo en lo que cree.