Un numeroso grupo de jóvenes ha participado esta madrugada en un botellón en la Marina de Ibiza. Una escena que, según ha denunciado a este diario una vecina del barrio, que prefiere mantenerse en el anonimato, se ha repetido durante las últimas tres semanas, aproximadamente.
Jóvenes sin mascarilla ni distancia de seguridad que, tras el cierre de los bares de la zona a las dos de madrugada, continúan la fiesta en los alrededores, explica esta testigo, provocando molestias a los vecinos de la zona.
La denunciante asegura que el ruido les impide descansar y, además, los jóvenes "dejan todo lleno de basura", creando una mala imagen del barrio. Por este motivo, la pasada noche, cuando se produjeron los hechos, la denunciante decidió llamar a la Policía Nacional. Sin embargo, según asegura, los agentes no llegaron a intervenir en el botellón y que los mismos jóvenes se dispersaron al percatarse de la presencia policial.