Momento histórico, sellándolo con un apretón de manos. Rusia y Ucrania firman un acuerdo sobre las exportaciones de granos. El documento estipula la reapertura de los puertos ucranianos del Mar Negro. Un acuerdo que genera esperanzas de que se pueda aliviar la crisis alimentaria internacional desencadenada a raíz de la invasión rusa. El tratado, después de dos meses de conversaciones moderadas por las Naciones Unidas y Turquía, finalmente ha llegado. Tanto Rusia como Ucrania tienen una gran importancia en el panorama de las exportaciones alimentarias del mundo y a través de sus respectivos ministros de Defensa e Infraestructura, se alcanza un entendimiento que pretende aliviar la hambruna y la inflación mundial de los alimentos. El sistema implementado permitirá a los pilotos ucranianos guiar a los barcos a lo largo de canales seguros en sus aguas territoriales. Y supervisados por un centro de Coordinación Conjunta con sede en Estambul, los barcos podrán transitar por el Mar negro hasta el estrecho del Bósforo en Turquía. De allí, los alimentos serán distribuidos al resto del mundo. El acuerdo será válido por 120 días, pero renovable y no se espera que se detenga en el corto plazo.