Los equipos de rescate se han acercado en las primeras horas del sábado para llegar a Rayan, un niño de cinco años atrapado en un pozo durante días, en una operación que ha conmocionado a Marruecos. Rayan cayó el martes en el pozo de 32 metros de profundidad de su pueblo, Ighrane, en la provincia de Chefchaouen, y desde entonces las labores de rescate no han cesado.