El motivo por el que no debes coger en brazos a tu perro (y menos si hay otros delante)

Un error que muchos cometen-

El motivo por el que no debes coger en brazos a tu perro (y menos si hay otros delante)

El motivo por el que no debes coger en brazos a tu perro (y menos si hay otros delante)

M. R.

Pero cuidado, porque a veces corremos el riesgo de comportarnos con nuestros animales como si estuviéramos delante de un niño. Las necesidades de un perro son diferentes y hay que conocerlas bien para no cometer un error.

Independientemente de que su perro sea pequeño, mediano o grande, nada cambia en su comportamiento. Los instintos del animal son los mismos, al igual que sus necesidades ancestrales. Los adiestradores y expertos conocen las técnicas útiles para el perro y pueden orientarle de la mejor manera posible. Aquí tratamos de darle algunos consejos que pueden orientarle, sobre todo si es la primera vez que tiene un perro.

La etología del perro lleva a no asimilar ciertas actitudes del dueño con las que podría tener una madre animal. Nuestro peludo amigo ve nuestras caricias como los lametones de un compañero animal. Otros gestos que consideramos afectivos externos son vividos de forma diferente por el perro. En los últimos tiempos, se ha puesto de moda llevar perros pequeños. Esta elección no siempre viene dictada por las necesidades de espacio. Según algunos estudios, parece que la gente elige razas pequeñas porque está sujeta a un impulso epimelético. Más que un impulso, se trata de una propensión que tienen algunas personas y que induce la necesidad de ocuparse de pequeños seres vivos. Esta propensión lleva a ciertos excesos, como besar al propio perro.

Los besos son percibidos por el animal como una violación de su espacio íntimo y, por tanto, pueden provocarle ansiedad. En la raza canina, no existen las mismas reacciones afectivas que encontramos en los humanos. Por lo tanto, no hay que tratarlos como a un niño, sino estudiar bien su código de comportamiento.

Incluso abrazar al perro puede desencadenar reacciones negativas. La interpretación que el animal da a este gesto puede ser de agresión o dominación. Obviamente, si esta es la percepción, puede haber oposición o rebelión por parte del perro. Evidentemente, no se trata de maltrato, pero sería una falta de respeto a su naturaleza.

Lo que no se debe hacer en absoluto en presencia de otros perros

Si se encuentra con otros perros durante un paseo por el parque o la ciudad, no coja a su perro. Apartar a tu mascota para evitar el contacto con otros animales de su misma especie podría ser perjudicial y, en algunos casos, peligroso. Si lo coges para apartarlo del ataque de otro perro, corres el riesgo de que el ataque sea aún más sangriento y de que te muerdan a ti. Si, por el contrario, alejas bruscamente a tu amigo durante un encuentro tranquilo, puedes desencadenar reacciones agresivas del otro animal.

Además, es bueno que los perros socialicen y exploren su entorno. Así que déjale libre para que corretee por donde no haya peligro y juegue con sus congéneres. Aislarle le entristecería y le haría reacio al contacto con otros seres, humanos o no. No está prohibido cogerle de vez en cuando, pero sin exagerar.