Armie Hammer (Santa Mónica, California; 1986) lo tenía todo para ser el nuevo galán de Hollywood. Su irresistible atractivo -rubio, de mirada azul cielo y casi dos metros de atlética complexión- lo había llevado a encarnar destacados papeles en películas de enorme éxito. Tras 'La red social' (2010) y la conmovedora 'Call me by your name' (2017), dirigida por Luca Guadagnino, llegaron otros papeles centelleantes, como el último 'remake' de 'Rebecca' (2020), junto a Lily James, estrella de la serie 'Downton Abbey', de la última 'Cenicienta' de Disney (2015) y el clon de Pamela Anderson en la serie de Hulú 'Pam & Tommy' (2022). Pero todo esto se fue al traste cuando el mundo descubrió con horror las acusaciones de violación y canibalismo que vertieron sobre él varias examantes.

Ahora HBO Max escarba en ese lado más sórdido del actor, que aunque lo negó todo cayó en desgracia y fue orillado por la industria.

Tras abandonar los dos rodajes que tenía en marcha entonces y pasar nueve meses en rehabilitación, el pasado verano estuvo ejerciendo de comercial en un 'resort' de las islas Caimán. En 'La saga de los Hammer: escándalo y perversión', la docuserie de tres entregas que acaba de estrenar la misma plataforma de 'La Casa del Dragón', se ahonda no solo en su turbio comportamiento, sino también en el oscuro legado de abusos y secretos de toda la dinastía de los Hammer, a la postre una de las familias más prominentes de Estados Unidos desde hace un siglo.

"Beber sangre"

El escándalo del actor 'caníbal' saltó a principios de 2021. Era el peor seísmo que vivía Hollywood tras el que hacía tres años había provocado el depredador Harvey Weinstein, que abusó y violó durante décadas a decenas de mujeres desde su atalaya de semidiós y superproductor de cine. El caso de Armie, sin embargo, lo destapó una internauta [@houseofeffie], que mostró a través de una cuenta privada de Instagram los deseos más sórdidos y caníbales de los que hacía gala el actor en la intimidad de una habitación de hotel, hablando incluso de "beber sangre", "comer corazones palpitantes" y de masturbarse tras "romperle las costillas" a su acompañante.

No fue la única víctima que relató en los tabloides cómo se las gastaba Hammer. Courtney Vucekovich, una de las exnovias del actor, explicó que era un hombre peligroso y manipulador hasta límites insospechados: "Es encantador, pero una vez que empiezas a hablar con él es bastante agresivo desde el principio (...). Es oscuro y retorcido".

Tampoco lo apoyó su exmujer, la estrella de la televisión Elizabeth Chambers, con quien contrajo matrimonio en 2010 y con la que tiene un niño y una niña. Tras una década juntos se divorciaron meses antes del escándalo, que la dejó a ella en "shock". Tardó semanas en reaccionar, y cuando lo hizo no se posicionó al lado del actor, sino que expresó su apoyo "a cualquier víctima de ataques y de abusos".

Impacto del documental

Ahora "sus amigos están nerviosos por las consecuencias que pueda tener el documental en Armie", ha recogido el diario 'The Sun', que asegura que el actor se mantiene "sobrio" y "comprometido" con su rehabilitación, desde que en junio acabó la terapia. Tras concluir su trabajo en las islas Caimán, las fuentes citadas por el tabloide explican que ahora vive en una de las residencias del actor Robert Downey Jr. Según la revista 'Vanity Fair', la estrella de 'Iron Man', que hace años también tuvo que pasar por desintoxicación, es un buen amigo, tanto es así que incluso habría costeado los meses en la clínica Guest House de Florida.

Pero el caso de Armie solo es la punta del iceberg de una saga con polémica, como explica la serie dirigida por Elli Hakami y Julian P. Hobbs. En ella se cuenta la oscura historia de este poderoso clan de EEUU a partir de revelaciones exclusivas, como la de la tía de Armie, Casey Hammer, así como "múltiples supervivientes" de los presuntos abusos del actor y sus parientes multimillonarios: desde las acusaciones de violencia hasta la manipulación política y el fraude financiero.

"Esta es una historia desgarradora sobre las consecuencias del poder sin control", ha resumido el director Hobbs.

Bisabuelo magnate del petróleo

La familia Hammer estaba encabezada por el bisabuelo de Armie, el magnate petrolero Armand Hammer, director ejecutivo de Occidental Petroleum amigo de los presidentes John F. Kennedy y Richard Nixon, el príncipe Carlos y los principales dirigentes de Rusia.

La tía de Armie, Casey, es una de los integrantes del clan que ofrece su impactante testimonio en el documental. Ella recuerda las agresiones de su padre, Julian, el hijo de Armand Hammer, hacia su madre Glenna. La mujer, de 61 años, también acusa a su progenitor de haberla violado cuando era un niña, y así lo reveló en un libro publicado en 2015, 'Surviving My Birthright'. Incluso afirma que su padre tuvo "orgías gigantes" con chicas de 16 y 17 años.

"Sé que mi abuelo tenía un lado oscuro, vi el lado oscuro de mi padre de primera mano, he visto el lado oscuro de mi hermano, y ahora he visto también el lado oscuro de Armie", asegura. "No te despiertas un día y te conviertes en un monstruo, es un comportamiento aprendido", sostiene la tía del actor.