Ainhoa Armentia se ha convertido, sin duda, en la gran protagonista del momento. Su relación con Iñaki Urdangarín la ha situado en el ojo del huracán mediático y, lejos del agobio que mostró en los primeros días, la amiga especial del ex duque de Palma se muestra cada vez con más aplomo ante los medios de comunicación que siguen cada uno de sus pasos.

Después de un fin de semana complicado en el que, según apuntan diversas fuentes, Ainhoa habría abandonado el domicilio conyugal - donde residía hasta ahora con su marido, Manuel, y sus dos hijos adolescentes - para instalarse temporalmente en la casa de sus padres, la vitoriana ha regresado a su puesto de trabajo y lo ha hecho con una importante petición a los reporteros.

"Buenos días. Os pido por favor que respetéis la intimidad de mi familia por favor ¿eh? Gracias, buenos días" ha rogado Ainhoa con aplomo, molesta porque diferentes medios de comunicación hayan indagado sobre la identidad de sus padres y el lugar en el que viven y estén intentando obtener sus primeras reacciones acerca de la relación que su hija mantiene con Iñaki Urdangarín.

Una amistad especial que habría pillado por sorpresa tanto a la familia de Ainhoa como a su marido, con el que continuaba conviviendo y con el que, a pesar de que supuestamente estaba en vías de separación, hizo un viaje a París esta Navidad.

Una relación sobre la que Ainhoa continúa sin decir nada, aunque nada queda del agobio y la sorpresa de los primeros días, ya que este lunes la hemos visto llegar a su trabajo de lo más tranquila pese a los titulares que su vida privada ha protagonizado en los últimos días.