Se acerca la temporada de viajes y no queremos estar desprevenidos. Sin embargo, uno de los dilemas anuales de muchas personas es cómo organizar su maleta. La escena típica de millones de personas, cuando llegan a su destino de vacaciones, es abrir su maleta para descubrir que su ropa está arrugada. Por supuesto, ninguno de nosotros lleva una plancha con nosotros.

La conclusión es que tendremos que esforzarnos en planchar nuestra ropa con las manos, intentando "plancharla" de la menor manera posible.

Pero, entonces, ¿cómo se las arreglan esas personas para organizar tan bien sus maletas, llenándolas pero encontrando todo como estaba cuando se fueron? La respuesta puede ser mucho más fácil de lo esperado, ya que proviene de los expertos en orden.

Quienes estén capacitados para mantener el orden en su casa probablemente también podrán reproducirlo en sus maletas. De hecho, los que conocen los trucos para mantener los cajones y los armarios ordenados tienen ventaja.

El embalaje es una cuestión de organización, mental incluso antes de que sea ambiental.

Esta es la primera regla básica

Mucha gente no piensa en ello, pero la primera regla para tener la ropa siempre en orden, a pesar de todas las mudanzas, es elegir una maleta dura. Parece algo trivial, pero el uso de una maleta de este tipo, que resistirá golpes y choques, proporcionará una mayor protección a nuestra ropa.

La segunda regla se refiere al peso

Tomémonos nuestro tiempo para hacer la maleta. La prisa es definitivamente una mala consejera, que nos hará cometer errores e imprecisiones.

Eso sí, en la base de la maleta tendremos que colocar la toalla o toallas de playa. Después, habrá que colocar las prendas más pesadas, como los vaqueros y otros pantalones. Normalmente, la ropa que más se arruga es también la más ligera, como las camisas y los vestidos, que dejaremos al final.

Encajar todo como un rompecabezas

Recuerda no olvidar ningún espacio disponible. De las 4 reglas de oro para no apretar la ropa en una maleta, ésta es quizá la más importante. Cada espacio de la maleta, de hecho, puede ser utilizado para meter incluso una pequeña prenda.

Por eso, la ropa interior, los trajes de baño, los calcetines y otras prendas pequeñas deben doblarse normalmente y luego enrollarse. De este modo, no se arrugan y, además, soportan otras prendas.

Cronometraje

Por último, recordemos la última regla, pero no menos importante. De hecho, debemos deshacer el equipaje nada más llegar al lugar. De este modo, pondremos nuestra ropa en los armarios del hotel y encontraremos todo como recién planchado.