Dicen que por la noche, durante el sueño, se suda una cantidad equivalente a una taza. Todo ese líquido acaba en las sábanas y el colchón. Por eso, limpiar ambos adecuadamente es fundamental para tener una buena higiene. Si bien, hacer frente a la limpieza del colchón no es tan sencillo como podría parecer, pues tiene distintas complicaciones. Siguiendo esta fórmula lo conseguirás sin mucho esfuerzo.
El primero paso para dejar el colchón como nuevo es aspirarlo. Bien a fondo, por ambas caras. Seguramente el colchón tendrá alguna mancha. Para eliminarlas, lo mejor es utilizar un producto casero hecho con los siguientes ingredientes: dos tazas de agua, una taza de agua oxigenada, ocho gotas de jabón y tres gotas de aceites naturales. Lo agitamos bien y pulverizamos sobre el colchón. Acto seguido se debe rascar bien la mancha con un cepillo de dientes.
Cuando se seque, el siguiente paso que hay que aplicar en la limpieza es esparcir bicarbonato por el colchón. Debe dejarse allí durante cinco horas y posteriormente se quitará aspirando bien.
Siguiendo este proceso, el colchón quedará como nuevo, lo que ayudará a mejorar el descanso.
El truco para limpiar los hongos de la bañera
Los hongos son uno de los principales enemigos de las duchas y bañeras. Se acumulan en las esquinas y las juntas y dan una sensación de suciedad difícil de combatir. Con este sencillo truco podrás deshacerte de esa negrura en el baño sin el más mínimo esfuerzo.
Para limpiar correctamente las juntas de la ducha solo hacen falta dos productos: algodón y cloro. Lo primero que se debe hacer con el primero es estirarlo en forma de churro. Una vez lo tenemos con esa forma debemos colocarlo sobre la superficie en la que se encuentren los hongos.
El siguiente paso será rociar todo el algodón con el cloro, que es un producto que puede encontrarse en casi cualquier supermercado. Después hay que dejarlo actuar durante 30 minutos.
El resultado será impresionante. Y es que aunque parezca increíble, solo habrá que quitar bien los algodonoes, porque las juntas estarán plenamente libres de hongos. Se aconseja enjuagar bien tras el proceso para retirar el cloro, que puede llegar a ser tóxico.
