El Grupo 2 de la Primera RFEF vivirá este domingo (12.00 horas) uno de los duelos más atractivos de la temporada. La UD Ibiza y el Real Murcia, dos de los equipos llamados a llevar la voz cantante en la categoría, medirán sus fuerzas cuando solo se han disputado tres jornadas ligueras.

Ocurra lo que ocurra en Can Misses será demasiado pronto para sacar conclusiones sobre qué deparará a celestes y granas al final de la campaña, pero, viendo el inicio de unos y otros, los murcianistas llegan con el agua al cuello y con la obligación de ganar si no quieren que empiecen a volar cuchillos a su alrededor.

Y es que, aunque Ibiza y Real Murcia han vivido pretemporadas paralelas en cuanto a planificación, el comienzo de la liga no ha podido ser más diferente para unos y otros. Mientras que los de Guillermo Fernández Romo han tenido un arranque perfecto de la competición, sumando tres victorias en los tres encuentros disputados; los de Gustavo Munúa se han llenado de dudas tras encadenar dos derrotas consecutivas en casa.

Dos comienzos totalmente opuestos en dos plantillas muy parecidas. Porque si muchos hablan del gran número de movimientos que el Real Murcia ha hecho en el mercado veraniego, el Ibiza no se ha quedado atrás. Y es que si los granas han firmado 24 fichajes -22 si contamos las salidas de Guilherme Morais y David Conejero-, los baleares también se han renovado completamente, incorporando a 22 jugadores nuevos.

Pero, por ahora, mientras que los de Romo han comenzado como si llevaran años jugando juntos, los de Munúa han ido confirmando partido a partido que han llegado al inicio liguero sin un plan establecido y sin ninguna identidad en el juego. De ahí que, a las primeras de cambio, el Real Murcia ya escuche la palabra final con vistas al encuentro del domingo en Can Misses.

Jornadas para sobrevivir

Decía Guillermo Fernández Romo antes del debut ante el Córdoba, que en estos primeros partidos se trataba un poco de sobrevivir, dado que todo era una incógnita. «Hay que alinear en consecuencia de los que preveamos que sea lo mejor para el rendimiento, sabiendo que ahora los partidos son bastantes inciertos, bastante largos. No hay clasificación, todavía no hay equipos con una buena o mala racha. Todos partimos con una emocionalidad muy alta y una motivación importante. Mi trabajo es alinear de la mejor manera posible todo esto, sabiendo que no todos los jugadores están en su mejor punto. Ya durante todo el año es difícil encontrar la mejor versión individual y colectiva de todos, pero tenemos que ser capaces de encontrarla este domingo», explicaba el técnico celeste, con pasado en las filas del club murcianista.

La plantilla del Ibiza celebra en el vestuario de Can Misses su triunfo ante el Atlético Baleares. | UD IBIZA

Pues si algo está consiguiendo Fernández Romo es sobrevivir. Porque empezó la liga en el Grupo II ganando en el Nuevo Arcángel al Córdoba (2-3), continuó imponiéndose en su estadio al Atlético Baleares (0-1) y este pasado domingo sumaba tres nuevos puntos al vencer en El Collao (0-2). Nueve de nueve que han colocado al Ibiza en la segunda posición de la tabla como colíder y con los mismos puntos que tiene el Castellón.

No ha tardado Romo en sacar brillo a su ataque, donde aparecen jugadores VIP como Cedric, Soko y Álex Gallar; y en entregar el volante del juego del equipo a Eugeni. Suman seis goles a favor los celestes, encajando solo dos.

Y mientras Romo sobrevive a la espera de que avancen los partidos y de que su Ibiza tenga ya una seña de identidad; el Real Murcia se ahoga en este inicio liguero pese a las ilusiones generadas con la llegada de varios fichajes de renombre.

Ganaron en Granada los granas con una remontada sobre la bocina, un 1-2 que hizo olvidar el mal juego desplegado; sin embargo, las derrotas en casa ante el Córdoba y el Sanluqueño han hecho que salten las alarmas a las primeras de cambio. Ya no por los malos resultados cuando solo se han disputado tres jornadas, sino porque el equipo de Munúa solo transmite sensaciones negativas.

Sin verse mejoría pese al paso de las semanas y tras una pretemporada más bien larga, lo que más preocupan son las grandes carencias que se ven sobre el césped, donde el Real Murcia, al margen de su debilidad defensiva, no se muestra como un equipo pese a tener grandes nombres.