Todos nos acordamos de esa primera edición de 'Operación Triunfo', de sus triunfitos y de nuestra Rosa López, a la que tenemos un gran cariño por cómo ha sabido crecer a lo largo del tiempo y permanecer en el mundo de la música, que tan complicado es. A pesar de los cambios, ella ha sabido agarrarse a la barca y no caerse al mar, y eso no solo le hace grande, también una profesional como la copa de un pino.

Rosa López desvela que Iñaki García, que se ha convertido en el gran amor de su vida, le habla todos los días de casarse con ella y bromea con que no se lo creerá cuando haya una pedida real: "casi todos los días me pide que me case con él. Que viene el lobo, que viene el lobo y al final, no me lo voy a creer".

La artista nos asegura que ya tienen el compromiso más importante, el de respetarse y amarse: "lo más importante ya lo tengo, más que el casamiento, tengo lo más importante que es casarme de alma, de compromiso, de amor de verdad" y agradece el gran gesto que Iñaki García tuvo en televisión con ella: "yo ya estoy como si estuviera, hincó rodilla el niño, me pegó un susto, sí. Él sabe que a la televisión le tengo mucho respeto y eso es un acto de amor maravilloso".

Aunque lo cierto es que nos confiesa haberse asustado al ver a su novio de rodillas: "me pegó un susto pero imagino que sería de la ciática que tenía" y nos asegura que en ningún momento pensaría que ganó Operación Triunfo por lástima: "la vida me trata muy bien y jamás voy a pensar, en la vida, a día de hoy, que es por pena. Hace muchos años, en mi cabeza, era completamente diferente". Y es que no se refería a que se aprovechasen de ella y recuerda que su vida es mucho más positiva que lo que se pueda mostrar en una entrevista editada: "en aquel momento, esa era mi sensación, con mi edad, con mis circunstancias, con mis límites. Cuando digo que quieren sacar tajada de mi lo digo en plan andaluza y es una forma de expresar cómo me sentía pero está editado y mi vida es mucho más positiva de lo que parece".