Un gijonés de 67 años ha sido detenido por la Unidad de Familia y Mujer de la Policía Nacional (Ufam) por un presunto delito de abuso sexual perpetrado contra la nieta de su pareja sentimental, una menor de 10 años, que advirtió a su madre de lo ocurrido. Este individuo, que ayer negó los cargos ante la jueza de guardia, seguirá en libertad, pero no podrá ahora acercarse a menos de 300 metros de la niña ni tampoco comunicarse con ella como medida cautelar en lo que avanza la instrucción del caso.
La investigación policial se inició hace unos días a raíz de la denuncia presentada en la Comisaría por la madre de la niña, en la que relataba el caso de abusos sexuales que su hija le había relatado. Según esa denuncia, era habitual que la menor pasase mucho tiempo al cuidado de su abuela, emparejada con el ahora investigado. En un momento dado, este individuo realizó tocamientos a la menor con intención libidinosa. Parece que se trató de un episodio aislado y no de algo continuado, lo que habría elevado sustancialmente la pena en caso de condena judicial. A raíz de ese episodio la niña se lo relató a su madre que presentó de inmediato la denuncia.
Los agentes de la Ufam llevaron a cabo la detención de este hombre, que en Comisaría se acogió a su derecho a no declarar. En los calabozos aguardó hasta ayer viernes, cuando pasó a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Gijón, ayer en funciones de guardia. En esta ocasión, este hombre sí optó por contestar a las preguntas de la magistrada, pero solo para negar las acusaciones de la niña. A la espera de que se dilucide lo ocurrido, la jueza le ha impuesto como medida provisional una orden de alejamiento. De incumplirla, incurriría en un delito de quebrantamiento de medida cautelar.
Los delitos por delitos contra la libertad e indemnidad sexual se incrementaron el pasado año en Gijón, donde se registraron dieciséis casos más otras tres agresiones sexuales con penetración, según los datos publicados por el Ministerio del Interior. En una entrevista publicada por LA NUEVA ESPAÑA, medio de Prensa Ibérica al que también pertenece este diario, el jefe de la Ufam en la Comisaría de El Natahoyo, Roberto Fernández, explicó que “casi la mitad de las agresiones sexuales en Gijón tienen a menores como víctimas”, como en este caso que ahora se investiga.
