Bashkim Osmani, albanokosovar de 50 años y considerado el máximo responsable del entramado mafioso, tiene un estrecha vinculación con Mallorca. Miembro de un clan con negocios bajo sospecha en Alemania -donde ya fue condenado a casi cuatro años de prisión junto a su hermano en 2008 por un delito económico-, llegó a la isla hace dos décadas y se casó con una mujer alemana en su mansión de Camp de Mar, en Andratx, en 2017. Para el banquete, con cientos de invitados, trajo en avión privado a conocidos artistas alemanes y albanos.
Osmani pasa largas temporadas en Mallorca, donde fueron arrestados su mujer y su suegro, pero la operación policial le pilló en Croacia. Allí fue capturado y se espera que en unos días sea extraditado a España. Hace cuatro años posó junto a los actores Nick Nolte y Til Schweiger en el restaurante Ritzi de Puerto Portals, registrado durante la operación y que según las pesquisas podría haber servido para el blanqueo.
El registro en su mansión de Camp de Mar llevado a cabo el pasado martes se prolongó más de lo previsto. Buena parte de los esfuerzos de los agentes se dedicaron a forzar la caja fuerte acorazada. Tras varias horas de trabajos, lograron abrirla y encontraron algo de dinero, joyas y documentación. Sin embargo, una parte del dinero, varios miles de euros, se encontraban casi a la vista, pero en el lugar más insospechado. En concreto, una caja de compresas situada en el cuarto de baño contenía una importante cantidad de billetes.
La investigación sitúa a Osmani como el líder de una organización criminal dedicada al narcotráfico y el blanqueo, por lo que su detención era una de las máximas prioridades de los agentes. La red se dedica, según las pesquisas, a introducir en Europa enormes cantidades de cocaína procedentes de Sudamérica a través de diversos puertos europeos. La droga se distribuía después por todo el continente en aviones privados, vehículos con dobles fondos, paquetes postales y contenedores de mercancías.