Podría ser el terrorífico guión de una película de terror, pero desgraciadamente se trata de un hecho verídico que pone los pelos de punta.

Amanda Hutton, de 51 años, fue condenada en Gran Bretaña en 2013 a 15 años de prisión por los cargos de negligencia infantl y homicidio involuntario tras descubrirse el cuerpo sin vida de su hijo Hamza Khan, de 4 años.

Estos horribles hechos le han costado a la madre solo siete años de libertad, ya que según publica el periódico The Sun, ha salido ya de prisión y el resto de su condena la cumplirá con trabajos a la comunidad.

La prensa británica ha mostrado su indignación por esta liberación ante las circunstancias en las que dejó morir a su pequeño.

Morir de hambre

Todo empezó cuando un vecino de Amanda Hutton se quejó de que constantemente tiraban pañales sucios por la verja de su jardín. Una policía fue enviada hasta la vivienda pero nadie respondió así que miró dentro de la casa a través del buzón ubicado en la puerta y le llegó un olor nauseabundo. Tras varias visitas la policía finalmente pudo acceder a la vivienda, donde se produjo el macabro hallazgo.

El cuerpecito sin vida de Hamza Khan, de 4 años, se encontraba agarrado a uno de sus juguetes, cubierto de moscas y debajo de una pila de zapatos, ropa y sábanas en una cuna de viaje. Llevaba muerto dos años y la autopsia certificó que el pequeño había fallecido por desnutrición, es decir, lo mataron de hambre.

Amanda Hutton tuvo ocho hijos con Aftab Khan, y cinco de ellos, de entre 5 y 13 años, fueron hallados en situaciones de miseria, suciedad y abandono dentro de la casa.

En el juicio, que despertó mucho interés en Gran Bretaña, la madre testificó que si el pequeño Hamza estaba desnutrido es porque era muy "quisquilloso con la comida". Sin embargo, otro de sus hijos explicó ante el juez que su hermano fallecido llegó a estar tan desesperado de hambre que se llegó a comer sus propias heces del pañal mientras su madre se emborrachaba en otra habitación.

El padre no estaba en la casa ya que sobre él pesaba una orden de alejamiento por violencia de género.