Se extiende por España una enfermedad que puede causar demencia temprana

El último informe de Vigilancia Epidemiológica de las ITS (infecciones de transmición sexual, en inglés), publicado por el Instituto de Salud Carlos III, alerta de un aumento de casos de una enfermedad de transmisión sexual (ETS) que puede provocar demencia si no se trata.

Analizando los datos entre 2021 y 2023, se evidencia un aumento de un 42,6% de la gonorrea y de un 24,1% de la sífilis. El crecimiento de ambas infecciones comenzó a principios de este siglo, de manera leve, y se aceleró a partir de la década pasada, en una tendencia similar a la que se registra en el resto del mundo. Tras una ligera caída en 2020, muy probablemente a causa de la pandemia de covid, la escalada continúa.

La población más afectada por las ITS está compuesta por hombres adultos jóvenes, sobre todo en la franja entre los 20 y los 34 años, aunque existen algunas variaciones en función del tipo de infección

La sífilis no tratada puede provocar complicaciones potencialmente mortales, como insuficiencia cardíaca, problemas orgánicos, demencia y otros problemas cerebrales. Los síntomas de la sífilis suelen ser sutiles y difíciles de detectar, y pueden evolucionar con el tiempo y aparecer y desaparecer. Las principales señales de alerta incluyen llagas o úlceras indoloras en los genitales, la boca o las manos, crecimientos verrugosos blancos o grises y erupciones en las palmas de las manos o las plantas de los pies.

Algunos pacientes también pueden experimentar síntomas gripales, pérdida de cabello en parches e inflamación de los ganglios linfáticos. Los síntomas pueden tardar tres semanas o más en aparecer después de la infección.

En cuanto a la gonorrea, se trata de una infección que frecuentemente se manifiesta con sensación de ardor al orinar y una secreción blanca amarillenta por el pene. Es mucho más prevalente en hombres (80% de los casos), con una edad mediana de 32 años. Los síntomas en las mujeres, poco frecuentes, son muy similares a los de una infección urinaria, por lo que es fácil confundirlos: ardor al orinar, relaciones sexuales dolorosas, dolor intenso en la parte baja del abdomen.

Estas infecciones suelen responder bien al tratamiento con antibióticos, pero las resistencias están provocando que cada vez haya más problemas para acabar con ellas, lo que puede convertirse en un problema de salud pública de primera magnitud, según llevan años advirtiendo tanto médicos como autoridades sanitarias.