Reportaje

Ana, operada de obesidad mórbida: "He perdido ocho tallas. Pesaba 120 kg y usaba un andador"

Tras la cirugía, esta vecina de Vinaròs ha ganado en salud y, por la calle, sus allegados apenas la reconocen

Ana tenía graves problemas de salud, que ha conseguido solucionar tras la cirugía con robot en el Hospital General de Castelló.

Ana tenía graves problemas de salud, que ha conseguido solucionar tras la cirugía con robot en el Hospital General de Castelló.

Noelia Martínez

Ana es una de las pacientes del Hospital General de Castelló que se ha sometido a una cirugía bariátrica con robot. Antes, cuando salía a la calle, necesitaba el andador --por su dolor de espalda, hernias,...--, y tres meses después, solo usa una muleta.

"Me echan diez años menos"

A sus 43 años, se siente más joven, y no solo en lo estético. Por las calles de Vinaròs apenas la reconocen y tiene que saludar ella: "Me echan 30 años (13 menos). Antes tenía la cara redonda como un balón. He perdido ocho tallas. Me entran pantalones de hace diez años".

Adiós a los terribles dolores

Aún recuerda los terribles dolores que sufría cuando le diagnosticaron una hernia discal y discos desplazados. "Con la medicación, entre cortisona, morfina, ...me fui hinchando y llegué a pesar 120 kilos. De eso hace cuatro años. No podía ni ir a casa de mi madre, que está a cinco minutos. Me aconsejaron un carrito como el que llevan los ancianos y si me cansaba me sentaba", relata.

Hasta que le dieron fecha de operación: el 31 de enero. "Tomé batidos y caldos de verduras para antes de la cirugía. Y nada de gas. Bajé a 114 kilos. Ahora peso 78,5 y ojalá llegue a 65 ó 70. Al principio no tenía ganas de nada, quizás me faltaba apoyo psicológico para el inicio de la recuperación", indica.

"He pasado mucho frío"

"He pasado mucho frío este invierno pero espero sudar menos este verano, pues estoy menos gordita. Ahora como menos, lo que me entra, poco, pero varias veces al día. Igual media tortilla que cinco boquerones", comenta. Pero ante todo se siente vencedora en salud, física y mental: "Ya no tomo medicación para el dolor de espalda y camino 6 kilómetros al día. Me levanto sonriendo y voy por la calle contenta. Antes no lo hacía". 

Suscríbete para seguir leyendo