Enganchados a la tecnológica: el 70% de los españoles admite tener dependencia

Los dispositivos electrónicos simplifican y agilizan gestiones, permiten hacer numerosas actividades, entre éstas teletrabajar, y facilitan el contacto entre personas, aunque también pueden tener un impacto negativo en la vida de los usuarios cuando se crea una dependencia tecnológica. De hecho, casi el 70% de los españoles admite tener dependencia de la tecnología –un 68% en el caso de los gallegos–, según el informe “Influencia de la tecnología en la vida de los españoles” de Kaspersky, que analiza la dependencia de la tecnología, cómo ha modificado los hábitos en España, y el nivel de seguridad y privacidad.

Esta dependencia tecnológica hace que los españoles descuiden otras tareas e, incluso, dejen de pasar tiempo con sus seres queridos y le resten horas al sueño. Por todo esto, un 46% cree que debería reducir su uso y uno de cada diez ha acudido a terapia para lograrlo, según esta encuesta, realizada a más de 2.000 personas mayores de 18 años. En concreto, son las aplicaciones de mensajería instantánea (32%) las que más dependencia generan, seguidas de redes sociales (22%) y plataformas de emisión en continuo (11 por ciento).

Mujeres más dependientes

En cuanto a sexo, las mujeres (70%) tienen una dependencia ligeramente mayor que los hombres (67,5%). Por edades, destacan los grupos comprendidos entre 26 y 35 años (83,5%), 18 y 25 (74,5%), y 36 y 45 (73,5%).

El teléfono móvil es el dispositivo más utilizado por los españoles para llevar a cabo sus actividades online (66%), seguido de los ordenadores portátiles (15%) y los PC de sobremesa (13%). Por el contrario, los menos emplazados son las tabletas (5%) y las televisiones inteligentes (1%).

Teniendo en cuenta que la mayoría de las compras y gestiones bancarias se realizan a través del móvil, los expertos aseguran que es imprescindible contar con un software que proteja esos datos de los ciberdelincuentes. Sin embargo, solo el 40,5% de los usuarios tiene una solución de ciberseguridad instalada en su aparato. Este dato es especialmente preocupante, ya que la encuesta pone de manifiesto que tres de cada diez españoles han sido víctimas de un ciberataque o estafa online. Los más habituales son, por este orden, comprar en una web fraudulenta (22%), descargar sin querer un virus (20,5%) y recibir un mensaje pidiendo hacer clic en un enlace fraudulento e introducir los datos personales (12%). Si la pregunta se amplía a cualquier dispositivo electrónico, el porcentaje de personas que emplean algún sistema de protección, aumenta hasta el 82% –un 84 % en el caso de los gallegos–.

El estudio también revela la influencia de las pantallas en las relaciones personales y laborales. El 45% de los españoles reconoce que pasaría más tiempo con su pareja si dedicara menos horas a sus dispositivos y el 40% duerme menos a causa del uso de la tecnología. Pero no todo queda en el ámbito privado: casi el 30% de los españoles señala que el uso personal de redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea durante la jornada laboral les quita horas de trabajo y hace que estén menos concentrados en sus tareas.

Respecto al impacto de las publicaciones de otras personas en su estado de ánimo, la mitad (55,5%) de los encuestados dice sentir indiferencia ante las fotos de vida idílica de sus amigos en redes sociales, ya que saben que “no es oro todo lo que reluce”. Aun así, el 20% de los españoles reconoce experimentar envida o tristeza porque su vida no es tan perfecta como la que ven en las redes sociales.

Entre las tareas que los españoles prefieren realizar en formato virtual frente al físico, destacan las gestiones bancarias (78%), escuchar música (47,5%), ver películas (42%), hablar con amigos y familiares (38%) y pedir comida a domicilio (38%).

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