La Asociación Argos ha llevado a cabo durante el primer trimestre del curso escolar el proyecto ‘Al Final de la Correa’, Apoyo y Refuerzo Educativo Asistido por perros Método Pellitero, en cuatro colegios pitiusos, el CEIP Portal Nou y el CEIP Sa Blanca Dona de Eiviossa y en el CEIP Mestre Lluís Andréu y alumnos del CEIP Sant Ferran de Formentera.

«Este programa está considerado como una medida extraordinaria de atención a la diversidad para alumnos con necesidades educativas especiales y como un recurso para tutores, profesores, equipo de orientación etc… en el aula ordinaria para mejorar las competencias curriculares y actitudinales de los alumnos de infantil, primaria y ESO», señalan desde la asociación, que apuesta por la Inclusión en todos sus programas, en las sesiones, siempre que sea posible, participan conjuntamente alumnos con y sin diversidad funcional.

Entre otros aspectos, en este programa se trabaja para favorecer la autonomía e independencia de los alumnos, desarrollar las relaciones sociales más normalizadas, fomentar la motivación para el aprendizaje, educar en valores y favorecer la mejora en diversas competencias, utilizando un perro, en este caso dos perras, Nara y Nica, como agente motivador, dinamizador, reforzador … etc.

Aumentan la motivación

En cualquiera de las actividades individuales o grupales el perro de apoyo constituye un nexo de unión y un catalizador social y emocional entre los alumnos, aumentando las posibilidades de interacción social entre los alumnos y entre estos y el profesional aumentando la motivación por aprender.

«Hemos podido ver a niños con el trastorno del Espectro Autista (TEA) con grandes dificultades de relación con el entorno, relacionarse e involucrarse en el cuidado de Nara y Nica mejorando así su capacidad comunicativa con el exterior», comenta Paulina López, directora del CEIP Portal Nou. «Con este programa hemos conseguido llegar a la persona, y para un centro vinculado con la educación integral de la persona, ha sido una gran revelación «, continúa.

«El perro de apoyo formado por el Método Pellitero tiene adquiridos una serie de recursos y habilidades que favorecen la creación de contextos de calma, de cooperación, espacios seguros. Adquieren también un gran control emocional y capacidad de concentración, además de alta tolerancia al estrés. Estos recursos favorecen espacios de aprendizajes naturales y motivadores. El perro de apoyo entiende y maneja la situación global y está habituado al entorno educativo», destacan desde Argos.

«El programa -afirman- se posiciona como un recurso capaz de crear espacios de aprendizaje diferentes, idóneos, amigables".

Argos agradece el apoyo económico recibido desde La Fundación Abel Matutes y Fundación Sa Nostra Caixabank, «sin el que este programa no se podría llevar a cabo, y esperamos poder conseguir más financiación para llegar a más centros educativos, ampliar la duración a otro trimestre, y así beneficiar a un mayor número de alumnos», destaca Maite Lozano, presidenta de la asociación promotora del proyecto.