Jéssica Gómez Marí, maestra de Primaria, siente pasión por los niños así que hace unos ocho años decidió hacer realidad su sueño y fundar una empresa dedicada a la organización de actividades de entretenimiento y fiestas para los más pequeños en Ibiza y Formentera.
Los primeros pasos los dio con la organización de cumpleaños para los hijos de familiares y amigos. A partir de aquella idea, Sueños de Ibiza ha crecido de manera imparable tanto en la variedad de eventos que desarrolla como en infraestructura y en personal.
Los primeros cumpleaños no tienen nada que ver con los que organizan hoy, ya que se ha ido sofisticado con distintas temáticas, decoración de mesas, piñatas, la tradicional búsqueda del tesoro y animaciones. Este año la novedad que más éxito está teniendo son los bailes de TikTok.
Otra de las líneas que tiene mucho éxito son las actividades que organizan en bodas, bautizos y sobre todo comuniones. «Así, los pequeños disfrutan de su fiesta paralela y los padres no tienen que estar tan pendientes de sus hijos», explica Jéssica Gómez.
La ‘Fiesta del pijama’ es otro de los grandes éxitos. Una decoración con tipis y camitas hace que los niños se lo pasen en grande en casa de sus amigos.
Además de los eventos privadas, esta empresa colabora con algunos ayuntamientos en las fiestas populares. En estos casos, los juegos de mesa gigantes, el empleo de materiales reciclados y el fomento de actividades relacionadas son la cultura ibicenca son algunas de sus especialidades.
Una de las características de Sueños de Ibiza es la flexibilidad y la adaptación a las novedades y a las demandas que surgen. A ello, se suma un equipo motivado y estable formado por psicólogas, pedagogas o maestras que hablan idiomas, así que pueden atender a familias extranjeras.
Jéssica Gómez se muestra muy satisfecha con los resultados de esta temporada. «Hemos duplicado el trabajo respecto a los años anteriores al covid y tenemos buenas expectativas de crecimiento», apunta. Por ello, se muestra preocupada por el resurgir de la competencia ilegal, con personas que trabajan con niños sin las formación ni nos requisitos necesarios como es un seguro. «Habría que regular esta situación», considera.
