La ley del aborto de 2010 dio la posibilidad a las mujeres de elegir el método para interrumpir sus embarazos hasta la novena semana de gestación: la opción instrumental (que requiere pasar por una sedación y un quirófano) y la opción farmacológica. Y las mujeres optan mayoritariamente por la primera (el 85% frente al 14%), dado que, según aducen, es la fórmula más rápida, más segura, que evita el dolor y vivenciar el duro proceso que supone expulsar el embrión sola y en casa.

Esta es la principal conclusión de un estudio presentado este martes por la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (ACAI) y realizado en 2021 por una muestra compuesta por 1.536 mujeres que acudieron a los centros concertado que realizan el 85% de los abortos en España.

Pese a que este estudio ratifica la preferencia por el método instrumental que ya se puso de manifiesto una encuesta similar de 2014, el Gobierno y las comunidades autónomas están dando pasos encaminados a apostar por el método farmacológico.

Además, el proyecto de reforma de la ley del aborto, aunque "es ambiguo" sobre este aspecto, "va a generalizar el método farmacológico desoyendo la opinión de las mujeres", según ha denunciado Eva Rodríguez, vicepresidenta de Acai.