Los cambios de color que exhiben los pulpos mientras duermen son característicos de dos estados de sueño alternos principales: una etapa de "sueño activo" y una etapa de "sueño tranquilo".

Los investigadores dicen que este hallazgo, publicado en 'iScience', tiene implicaciones para la evolución del sueño y podrían indicar que es posible que los pulpos experimenten algo parecido a los sueños.

Los científicos solían pensar que solo los mamíferos y las aves tenían dos estados de sueño. Más recientemente, se demostró que algunos reptiles también muestran sueño no REM y REM. También se informó un estado de sueño similar al REM en la sepia, un cefalópodo pariente del pulpo.

"Eso nos llevó a preguntarnos si también podríamos ver evidencia de dos estados de sueño en los pulpos", dice la autora principal Sidarta Ribeiro del Instituto del Cerebro de la Universidad Federal de Rio Grande do Norte, Brasil. "Los pulpos tienen el sistema nervioso más centralizado de todos los invertebrados y se sabe que tienen una alta capacidad de aprendizaje".

Para averiguarlo, los investigadores capturaron grabaciones de video de pulpos en el laboratorio. Descubrieron que durante el "sueño tranquilo" los animales estaban quietos y silenciosos, con la piel pálida y las pupilas de los ojos contraídas en una hendidura. Durante el "sueño activo", fue una historia diferente. Los animales cambiaron dinámicamente el color y la textura de su piel. También movieron sus ojos mientras contraían sus ventosas y su cuerpo con espasmos musculares.

"Lo que lo hace más interesante es que este 'sueño activo' ocurre principalmente después de un largo 'sueño tranquilo', generalmente de más de 6 minutos, y que tiene una periodicidad característica", dice Ribeiro.

El ciclo se repetiría a intervalos de aproximadamente 30 a 40 minutos. Para establecer que estos estados de hecho representaban el sueño, los investigadores midieron el umbral de excitación de los pulpos mediante pruebas de estimulación visual y táctil. Los resultados de esas pruebas mostraron que tanto en el estado "activo" como en el de "sueño tranquilo", los pulpos necesitaban un fuerte estímulo para evocar una respuesta conductual en comparación con el estado de alerta. En otras palabras, estaban durmiendo.

Los hallazgos tienen implicaciones interesantes para los pulpos y para la evolución del sueño. También plantean nuevas e intrigantes preguntas.

"La alternancia de estados de sueño observada en el pulpo insularis parece bastante similar a la nuestra, a pesar de la enorme distancia evolutiva entre cefalópodos y vertebrados, con una divergencia temprana de linajes hace unos 500 millones de años", dice la primera autora y estudiante de posgrado Sylvia Medeiros Instituto del Cerebro de la Universidad Federal de Rio Grande do Norte, Brasil.

"Si de hecho dos estados de sueño diferentes evolucionaron dos veces de forma independiente en vertebrados e invertebrados, ¿cuáles son las presiones evolutivas esenciales que dan forma a este proceso fisiológico?" se pregunta. "La evolución independiente en los cefalópodos de un 'sueño activo' análogo al sueño REM de vertebrados puede reflejar una propiedad emergente común a los sistemas nerviosos centralizados que alcanzan una cierta complejidad".

Medeiros también dice que los hallazgos plantean la posibilidad de que los pulpos experimenten algo similar a soñar. "No es posible afirmar que están soñando porque no pueden decirnos eso, pero nuestros resultados sugieren que durante el 'sueño activo' el pulpo podría experimentar un estado análogo al sueño REM, que es el estado durante el cual los humanos sueñan más", dice. "Si los pulpos realmente sueñan, es poco probable que experimenten tramas simbólicas complejas como nosotros. El 'sueño activo' en el pulpo tiene una duración muy corta, típicamente de unos segundos a un minuto. Si durante este estado hay algún sueño en curso, debería ser más como pequeños videoclips, o incluso gifs".

En estudios futuros, a los investigadores les gustaría registrar datos neuronales de cefalópodos para comprender mejor lo que sucede cuando duermen. También sienten curiosidad por el papel del sueño en el metabolismo, el pensamiento y el aprendizaje de los animales.

"Es tentador especular que, al igual que en los humanos, soñar en el pulpo puede ayudar a adaptarse a los desafíos ambientales y promover el aprendizaje", dice Ribeiro. "¿Los pulpos tienen pesadillas? ¿Podrían los sueños de los pulpos estar inscritos en sus patrones dinámicos de piel? ¿Podríamos aprender a leer sus sueños cuantificando estos cambios?".

Y junto a estas incógnitas, quizás otros se pregunten si los pulpos sueñan con "ovejas eléctricas", como lo hizo el escritor Philip K. Dick de los androides en el título de la novela de ciencia ficción que inspiró la película de Ridley Scott 'Blade Runner'.