Andan las aguas tan revueltas por la sucesión de temporales y los efectos del cambio climático que en la ría de Vigo acaban colándose seres de lo más peculiares. Especies de otras latitudes y profundidades, de todos los tamaños y con formas tan extravagantes que algunas incluso asustan. Pero de todo el extenso catálogo de criaturas marinas llegadas a la orilla de las playas viguesas en esta última década pocas han causado tanta cinfasación como la decena de minúsculos bichos localizados este sábado en Samil.

Salvo a los entendidos en la materia como los biólogos del CSIC que estudiaron unos ejemplares en el laboratorio hasta su devolución al mar este martes, al ciudadano de a pie que escuche el nombre científico, Phronima sedentaria, no le diría absolutamente nada. Y es normal porque la fama mundial de este anfípodo hypérido de la familia de la pulga de arena le viene por haber inspirado al director Ridley Scott para recrear una de las alimañas más repelentes vistas en la gran pantalla, ese "octavo pasajero" que inauguró la saga cinematográfica Alien.

Sobre los parecidos entre esta Phronima y la monstruosidad que aparece por primera vez saliendo del pecho de uno de los tripulantes de la nave espacial Nostromo se ha discutido hasta la saciedad en los 40 años transcurridos desde el estreno de la película.

Sin olvidar que la criatura de la famosa cinta experimenta diferentes mutaciones desde el inicio de esa impactante secuencia, lo que complica todavía más la concreción de una referencia dentro de la amplia población animal, los especialistas en este campo concluyen que si bien solo la cabeza guarda cierta similitud con el bicho en cuestión, todos coinciden en que fue el comportamiento de esta especie la que sirvió a Scottpara mostrar al mundo ese pasajero alienígena que ahora desembarca en Vigo.