Libertad de Prensa

Aumenta la violencia contra periodistas en America Latina

EFE

Ronderos participa con otros periodistas y jueces en un simposio sobre la impunidad de los crímenes contra la libertad de expresión que se celebra esta semana en Manila.

En su opinión, indicó que los países más problemáticos son México, debido a la influencia del narcotráfico, y Venezuela, donde "el propio Estado y agentes radicales prochavistas persiguen a la prensa crítica".

La presidenta de la fundación indicó a Efe que en Colombia "ha mejorado después de haber pasado una época terrible en la que eran asesinados ocho o 10 periodistas al año", pero advirtió que existe un "gobiernismo furibundo" que no tolera las críticas a la política del Ejecutivo.

Similar opinión sostuvo el magistrado de la Audiencia Nacional de España, Fernando Andreu Merelles, quien aseguró a Efe que en Filipinas y en algunos países de América Latina los gobiernos tratan de influir con fines políticos en los medios mediante la utilización de los instrumentos del Estado.

Merelles, experto en la materia, consideró que en España este tipo de problemas está superado, pero señaló que existen otros relacionados "con las guerras mediáticas, que se convierten también en batallas ideológicas, porque cada medio se inscribe dentro de un partido o corriente concreta".

De todos modos, según Ronderos, el periodismo más peligroso no es el político sino aquél que trata de investigar la corrupción, porque "cuando uno daña el negocio a alguien la cosa se pone muy peligrosa", puntualizó.

La representante de Colombia en la conferencia de Manila opinó que el problema viene de la crisis de los sistemas judiciales, debido a la corrupción y dependencia política que sufren, y de esta forma muchos de los crímenes contra los periodistas quedan impunes.

La periodista dijo que, además de afectar a la vida de los profesionales, también repercute negativamente en la calidad del trabajo que realizan ya que "el daño más terrible pero a la vez la salida más fácil es la autocensura".

"Debemos recordar que cuando un periodista resulta atacado no sólo es violado un derecho individual sino también uno colectivo, el derecho a la información de los ciudadanos", apostilló.

Ronderos recordó que un reciente informe del Comité de Protección de los Periodistas de Nueva York, la autocensura en la prensa de América Latina tiene un peso muy importante, "no sólo por razones políticas, sino por motivos económicos".

Según el magistrado español la base de estos ataques es que la "prensa está llevando a cabo un papel que no es el suyo, los medios deben informar, pero la labor de denunciar pertenece al Estado mediante la Policía, la Fiscalía y los jueces de instrucción".

Merelles manifestó que en los países latinoamericanos el Estado no adquiere el papel de denunciante porque es corrupto y, por lo tanto, los medios de comunicación "como voz de la sociedad" deben hacerse eco de las injusticias.

La presidenta de la Fundación para la Libertad de Prensa de Colombia consideró que la solución es múltiple y no sólo jurídica, "la población no debe sentir a los medios como algo alejado de la sociedad y los periodistas deben protegerse entre ellos y proteger su información".

Un total de 95 periodistas fueron asesinados en el 2007 en todo el mundo, casi la mitad de ellos en Irak, que es el país donde más reporteros pierden la vida de forma violenta, según un informe presentado a principios de febrero por la Asociación Mundial de Periódicos (WAN).

El año pasado se convirtió en el segundo con más periodistas y trabajadores de los medios de comunicación asesinados desde que la WAN comenzó a elaborar estas listas anuales en 1998, por detrás del 2006 con 110 muertos.

Tracking Pixel Contents