Investigadores de la Clínica Universidad de Navarra han abierto una vía para tratar el glioma intrínseco difuso de tronco, el tumor cerebral más letal en niños. 

Los resultados de este ensayo clínico, que se han publicado este jueves en la revista científica New England of Journal of Medicine, que el procedimiento llevado a cabo es “seguro” y “realizable”. 

Según explica el doctor Jaime Gállego, especialista del Departamento de Neurología de la Clínica Universidad de Navarra y coordinador de su Área de Tumores Cerebrales, "se trata de un tumor agresivo, con un pronóstico todavía sombrío".

  • “El glioma intrínseco difuso de tronco es un tumor maligno que infiltra el tronco cerebral y que, por tanto, afecta a estructuras vitales del sistema nervioso central, provocando manifestaciones neurológicas graves”.

Es un tumor que se desarrolla en una parte vital del ser humano y que ocurre, generalmente, en niños de entre 5 y 10 años. Actualmente, no hay un tratamiento curativo para esta enfermedad y la única opción es la radioterapia.

Fotografía de archivo de una enfermera caminando en el servicio de Pediatría de un hospital. EFE/Fernando Díaz

Los síntomas del glioma difuso intrínseco de tronco son muy característicos:

  • Alteraciones en el movimiento de la cara.
  • Problemas al andar y al tragar.
  • Falta de fuerza tanto en brazos como piernas.

Actualmente, el tratamiento basa en la radioterapia, aunque la mitad de los niños que la reciben no sobreviven más de un año

Como especifica el especialista, la mitad de los niños que reciben el, hasta ahora, único tratamiento disponible hoy en día “no sobreviven más de un año”.

Esta nueva terapia consiste en inyectar en el tumor un virus oncolítico, un tipo de virus que causa mayoritariamente cuadros catarrales en la población, que ha sido desarrollado en el laboratorio del MD Anderson Cancer Center de Houston (Estados Unidos).

  • “Este caso muestra la importancia de los ensayos clínicos y el valor de alumbrar nuevas vías de tratamiento para aquellas enfermedades graves que no tienen cura todavía”, subraya el doctor Gállego.

Ensayo en doce niños

El ensayo se ha realizado en doce niños diagnosticados con glioma intrínseco difuso de tronco, tanto de España como de otros países europeos. Una muestra pequeña pero que, sin duda, es una esperanza para el futuro de esta enfermedad.

A través de este virus oncolítico, modificado genéticamente para que solo pueda infectar, replicarse y matar selectivamente a las células tumorales, se ha conseguido que los pacientes tengan una supervivencia mayor a la que se tenía hoy en día.

Pero no solo se ha logrado un aumento de la esperanza de vida. El virus oncolítico también ejerce otro efecto antitumoral adicional, potenciando la acción del propio sistema inmune del paciente frente al tumor. 

Además, tal y como recalca la doctora Marta Alonso, se ha podido “analizar el tumor y su microambiente antes del tratamiento, y han podido comprobar los cambios producidos y la respuesta inmune antitumoral desencadenada tras la administración del virus”.

Las secuelas de por vida del cáncer infantil EFE/Toni Albir/Archivo

¿Cómo funciona el virus oncolítico?

  1. El virus infecta a la célula tumoral que ha producido la enfermedad.
  2. Se replica solo en las células tumorales hasta su destrucción.
  3. Los virus esparcidos pueden seguir infectando a las células tumorales.
  4. De la célula tumoral infectada se desprenden señales que despiertan el sistema inmune.
  5. El sistema inmune detecta las células tumorales y las elimina.