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Sanidad

El alarmante hallazgo médico sobre el vapeo y la salud pulmonar

Especialistas respaldan la ampliación de la Ley Antitabaco y señalan que fumar al aire libre también enferma al resto de clientes

Neumólogos y cardiólogos alertan del peligro del vapeo por provocar graves enfermedades

Neumólogos y cardiólogos alertan del peligro del vapeo por provocar graves enfermedades / informacion.es

A. Fajardo

El debate sobre las consecuencias del cigarro ha vuelto con fuerza tras la aprobación de la nueva Ley Antitabaco en el Consejo de Ministros, una norma busca endurecer la normativa vigente e incluye la prohibición de fumar en terrazas y la venta de vapeadores a los jóvenes, con multas para sus padres. Esta medida ha sido celebrada por neumólogos de la provincia, que avisan de un repunte de enfermedades respiratorias vinculadas a los cigarrillos eletrónicos, especialmente entre adolescentes y jóvenes. Además, advierten de que el humo también enferma.

“Nos llega gente joven sin enfermedades previas, con síntomas graves como broncoespasmos, inflamación pulmonar aguda e incluso insuficiencia respiratoria por uso de vapeadores”, explica el doctor Carlos Baeza, neumólogo en el Hospital General de Elche. “Hay casos en los que el paciente sufre fatiga al mínimo esfuerzo, tos persistente y cierre de las vías respiratorias que puede acabar en ingreso hospitalario”, detalla.

El paciente sufre fatiga al mínimo esfuerzo, tos persistente y cierre de las vías respiratorias

Carlos Baeza

— Neumólogo Hospital General de Elche

Según Baeza, muchos consumidores creen que vapear es menos dañino, pero “inhalar compuestos químicos y metales pesados, aunque sea a dosis bajas, tiene efectos inflamatorios demostrados. No es una cuestión de molestia por el olor, es una cuestión de salud pública”.

El especialista recuerda que las partículas tóxicas no desaparecen tras apagar el dispositivo. “No solo estamos hablando de humo activo. Las partículas del tabaco y del vaper se quedan en el ambiente y pueden afectar a niños, personas asmáticas o con enfermedades cardiovasculares. Es un riesgo real”.

Una mujer fuma un cigarro.

Una mujer fuma un cigarro. / INFORMACIÓN

En esta línea, Magdalena Mateo, responsable de la Unidad de Conductas Adictivas del Departamento de Salud del Vinalopó, también se muestra crítica con la permisividad que existe en el consumo juvenil de cigarrillos electrónicos. “Muchos adolescentes se enganchan al vaper pensando que es menos adictivo, pero algunos estudios ya indican que puede ser incluso más cancerígeno que el tabaco tradicional, por las sustancias químicas que libera la combustión”.

Algunos estudios ya indican que puede ser incluso más cancerígeno que el tabaco tradicional

Magdalena Mateo

— Responsable de la Unidad de Conductas Adictivas del Vinalopó

Además, apunta a un reto social: el control del consumo entre menores. “Multar a los padres por el uso de vapers entre adolescentes me parece difícilmente aplicable. La adolescencia es una etapa de rebeldía, y el acceso al vaper es demasiado fácil”.

Paralelamente, Eusebi Giner, Jefe del Servicio de Neumología del Hospital de Sant Joan, comparte que, en general, han aumentado los problemas de salud por el vapeo, no solo los de nicotina, sino de los sabores, que tienen muchas sustancias químicas. "Son capaces de causar insuficiencia respiratoria aguda, neumonía lipoidea (acumulación de lípidos en los pulmones) y agravamiento del asma bronquial.

El experto también pone e foco en otras consecuencias del cigarrillo electrónico: "Habrá que ir contemplando la gestión de los residuos del vapeo porque será un problema de salud a medio y largo plazo, tanto en el caso de los recargables, como los desechables".

Según un estudio del Grupo Español de Cáncer de Pulmón, más de la mitad de los adolescentes de entre 14 y 18 años ha vapeado y el 25,2 de los niños de entre 12 y 13 años ha usado alguna vez estos dispositivos. Tanto es así que el aumento de alumnos que se han sumado a esta moda en los institutos alicantinos ha puesto en alerta al profesorado.

Fumadores pasivos

Sin embargo, más allá de los riesgos a los que se exponen los fumadores, ¿qué consecuencias tiene para una persona que no fuma respirar el humo de un cigarro en un sitio abierto como una terraza? Ante esta pregunta que ha resurgido estos días, con motivo de las nuevas restricciones que prepara el Gobierno, los neumólogos advierten de que los mayores peligros los sufren las personas con enfermedades crónicas o los niños, mientras que a los que estén sanos es poco probable que desencadenen una patología grave, según Baeza, quien advierte de que son especialmente sensibles las personas con asmas, Epoc (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) y los enfermos cardiovasculares al poder generar el humo inflamacion de sus vias repsiratorias, tos, fatiga y que se descompensen-

No obstante, también se ha demostrado que el tabaco "a dosis muy bajas es perjudicial para la salud, nos afecta a todos", añade.

Al hilo, el doctor Giner advierte de que el tabaquismo pasivo ha sido durante años un enemigo invisible. "No sabíamos cómo medir su impacto hasta hace poco, pero ahora hay evidencia clara de que también enferma", agrega el jefe del Servicio de Neumología del Hospital de Sant Joan. “Las terrazas no son espacios totalmente abiertos. Muchas están semicerradas, el humo se concentra y aumentan los riesgos”, advierte.

Las terrazas no son espacios totalmente abiertos. Muchas están semicerradas y el humo se concentra

Eusebi Giner

— Jefe de Neumología del Hospital de Sant Joan

Para este especialista la nueva ley supone “un paso importante” hacia una sociedad más saludable. “No se puede prohibir el tabaco de golpe, pero sí hay que avanzar hacia una regulación más estricta, especialmente en entornos como hospitales, guarderías o parques. Incluso podría llegar el día en que se prohíba fumar en la vía pública”, añade.

El daño de tercera mano

Desde una perspectiva más centrada en la prevención y el tratamiento de adicciones, Magdalena Mateo, responsable de la Unidad de Conductas Adictivas del Departamento de Salud del Vinalopó, pone el foco en un tipo de exposición al tabaco todavía poco conocido: el humo de tercera mano.

“Se trata de los residuos tóxicos que quedan en cortinas, sofás o superficies mucho después de haber fumado. Aunque no se vea, ese humo también afecta”, advierte Mateo. “Tanto el humo de primera mano (el que fuma) como el de segunda (quien respira cerca del fumador) y este de tercera están comprobados como perjudiciales según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es importante entender que no hay una dosis segura”, añade la responsable de la Unidad de Conductas Adictivas del Departamento de Salud del Vinalopó.

Unas 60.000 personas fallecen al año en España por patologías atribuibles al tabaco, de ellas en torno a 2.500 en la provincia de Alicante. El 10 % de estos decesos son de fumadores pasivos, es decir, personas que no fuman pero que han estado expuestas al humo de los cigarrillos. 

La hostelería rechaza el veto al humo en las terrazas

La prohibición de fumar en las terrazas no contenta a todos por igual. El sector de la hostelería es el principal detractor de esta medida. "Todo lo que sean limitaciones nos va a perjudicar, no creo que haya gente a la que le disuada sentarse en una terraza porque se fume", afirma Javier Galdeano, de la Asociación de Locales de Ocio y Restauración de Alicante .

El representante de los restaurantes y pubs comparte que no fumar en el interior de un establecimiento "tenga su lógica, pero en un reciento abierto me niego a creer que sea grave".

Bajo estos argumentos, considera que se debería de haber dejado a discreción del titular de la terraza la decisión de prohibir fumar, al tratarse de una localización que está en la vía pública.

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