Fijar objetivos es una cosa, conseguirlos es otra. Cuando nos proponemos perder unos kilos de más, pensamos puntualmente en el ejercicio. De hecho, es una gran forma de corregir los defectos que lastran nuestra autoestima y nos limitan.

Por desgracia, a menudo no mantenemos esa constancia en el entrenamiento que nos prometimos al principio. Pensamos en cuando salimos a correr: después de unas semanas, o menos, ya nos hemos rendido.

Sin embargo, hay pocas soluciones mejores que un buen trote para mantenerse en plena forma. Podemos hacerlo en cuanto tengamos algo de tiempo libre, quizá junto con algunos ejercicios para adelgazar las rodillas y las pantorrillas.

Sin embargo, para aquellos que son nuevos en el mundo del running, es aconsejable empezar sólo después de seguir algunos consejos. Como los que se dan en las siguientes líneas.

Hacer ejercicio al aire libre es estimulante, pero hay que saber cómo vestirse para correr. En una época tan calurosa como la que estamos dejando atrás, la ropa transpirable puede ayudar. Mejor aún si están perforados, como las camisetas, las camisas de tirantes y los siempre presentes pantalones cortos. Las mujeres pueden completar el conjunto con un buen sujetador sintético con tejido fit dry o climacool. Como alternativa, se puede usar algodón o tela de rizo.

En invierno, en cambio, es importante mantener la temperatura del cuerpo constante, pero sin llegar a ser demasiado pesado. La ropa en la que hay que centrarse es la técnica, con trajes o chaquetas cortavientos y transpirables. Acuérdate también de un calentador de cuello, guantes de lana y zapatos que aíslen de las heladas.

Cómo empezar a correr desde cero con este programa para adelgazar a los 50

Tanto si somos todavía jóvenes como si hemos llegado a la mediana edad, debemos tener cuidado al principio. Para ser precisos, antes de correr, debemos caminar. Comenzamos con un agradable paseo de media hora, a un ritmo regular pero controlado. Repetimos el ejercicio cada dos días, ampliando el paseo cinco minutos cada vez, durante unas dos semanas.

Cuando seamos capaces de caminar durante una hora sin parar, podremos por fin organizarnos para correr. Comenzamos corriendo cinco veces durante un minuto aproximadamente. En cada paso haremos un intervalo de 5 minutos de caminata. Cada dos salidas aumentaremos el tiempo que corremos y disminuiremos el tiempo que caminamos, hasta llegar a correr una hora consecutiva. En cualquier caso, siempre empezamos y terminamos la sesión con un buen paseo.

Si quisiéramos, también podríamos optar por la carrera continua. Después de comenzar caminando durante unos 15 minutos, corremos durante otros 5 minutos, y luego terminamos de nuevo a un ritmo reducido. Después de un par de sesiones, podemos aumentar la duración de la carrera a expensas del tiempo de caminata.

Para entender cómo empezar a correr desde cero, es necesario moverse de la manera correcta. Si tenemos alguna duda, debemos consultar a un experto en fitness, que podrá mostrarnos la mejor manera de dar nuestros primeros pasos. Y no olvides estirar al final de cada sesión.