Ca na Majora, la unidad de media estancia para convalecientes y crónicos del Hospital Can Misses, estará funcionando al cien por cien en el último trimestre de 2022. Así lo refleja el Plan Estratégico del Área de Salud de Ibiza y Formentera 2022-2024’, que se presentó hace unos días. Esta unidad, ubicada en la zona de hospitalización del viejo Can Misses, estaría ya operativa si no hubiera sido por la pandemia, que ha obligado a mantener este espacio libre de usuarios para poder albergar, en los momentos más complicados de las diferentes olas, a pacientes covid. Ca na Majora, que se amuebló en los días previos a la explosión del virus en las Pitiusas, ha sido un dispositivo básico en el plan de contingencia de Can Misses durante estos cerca de dos años.
La puesta en marcha de Ca na Majora está incluida en el desarrollo del programa de atención a la cronicidad del Área de Salud, que prevé alcanzar otros dos objetivos para finales del año próximo: aumentar la colaboración con recursos sociosanitarios como Cas Serres e impartir formación en cronicidad a los profesionales del área sanitaria. «El plan recoge cómo queremos que sea nuestra área de salud de aquí a tres años, y traza el camino para alcanzar la sanidad deseada por la sociedad, los pacientes y los profesionales», comenta la gerente, Carmen Santos, en la presentación del documento, que supera las 200 páginas.
Vivir «en la incertidumbre»
Santos destaca la importancia de contar con un plan «en este momento de transición». «Los recursos clásicos de atención a la salud y a la enfermedad han tenido que reorganizarse y rediseñarse, y los circuitos de accesibilidad replantearse totalmente. Vivimos en la incertidumbre de cómo va a seguir afectando esta situación a la asistencia sanitaria y no podemos bajar la guardia», continúa la máxima responsable de la sanidad pública pitiusa.
Además, el plan de atención a la cronicidad prevé también que los pacientes crónicos avanzados o complejos entren en el programa de atención domiciliaria. El objetivo es que antes de acabar 2022 el 90% de estos usuarios estén ya dentro del programa y que se hayan realizado el 60% de las visitas a pacientes crónicos complejos. De la misma manera, la intención es establecer un circuito específico para cuando estos pacientes crónicos complejos lleguen a Urgencias, para lo que es necesaria la implicación de los diferentes servicios asistenciales así como de la dirección de Urgencias. Al acabar 2022, el 70% de estos pacientes deberían ser vistos en este circuito, que busca ofrecer una atención más acorde con su situación. Además, el plan se marca como meta reducir un 5% el tiempo que estos usuarios pasan, de media, ingresados, un objetivo del que son responsables las direcciones médicas y de enfermería.
«Se está viviendo una transformación del modelo asistencial en la que destaca la necesidad de gestionar la enfermedad crónica y la dependencia, y realizar un abordaje integrado y multidisciplinar de la enfermedad, cada vez con mayor complejidad y pluripatología», indica el documento en la presentación, dejando clara la importancia de la atención a la cronicidad. El texto hace hincapié en cómo el coronavirus ha modificado la atención sanitaria. «La interrupción parcial de la actividad ha tenido un impacto negativo, con un incremento de pacientes en las listas de espera para consultas externas e intervenciones quirúrgicas», indica el documento.
Cartera de servicios
Además de la atención a la cronicidad, la primera de las líneas del plan estratégico, centrada en el modelo asistencial, prevé que cada año se actualice la cartera de servicios de todos los centros y unidades del área sanitaria. La primera puesta al día debería estar hecha en el primer trimestre de 2022. En el último, deberían estar ya activas al menos la mitad de las enfermeras de práctica alcanzada hospitalaria, cuya relación de perfiles específicos debe estar lista entre abril y junio de ese mismo año.
Otro de los objetivos que se ha marcado el Área de Salud es contar con un servicio de Medicina Preventiva. Para ello, a principios de 2022 la gerencia quiere contar ya con un facultativo especialista en esta materia.
Otro punto importante es la promoción de autocuidados y prácticas saludables entre la población. Esto se incluirá dentro de la cartera de servicios de Psicología Clínica y Salud, detalla el plan estratégico. Esto pasa, explica, por «crear vías de coordinación entre Atención Primaria, atención hospitalaria e instituciones externas para atender conjuntamente las necesidades de la población en prevención y promoción de la salud», así como por «priorizar acciones encaminadas a disminuir los daños psicológicos derivados de prácticas de gran impacto biopsicológico en la población infantil y adulta».
