Un total de 1.200 personas mayores de Balears fueron atendidas el año pasado por la Cruz Roja gracias a la casilla solidaria del IRPF que gestiona la conselleria de Asuntos Sociales y Deportes. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en Balears hay 108.300 personas que están solas, de las que 43.000 son mayores de 65 años.

Hasta 238 voluntarios de Cruz Roja dedican parte de su tiempo a la atención a las personas que viven en soledad, a quienes les ofrecen apoyo presencial y emocional, en sus casas y por teléfono. Junto a estos voluntarios hay un equipo técnico de profesionales (psicólogos, enfermeros y trabajadores sociales) que diseñan las intervenciones y, a la vez, respaldan y asesoran a todos los voluntarios en el desarrollo de este trabajo solidario.

Según Cruz Roja, que desde los años 90 desarrolla programas de acompañamiento, en los últimos años ha aumentado la cifra de interesados en hacer labores de voluntariado. En cuanto al perfil del voluntario, pero cada vez hay más jóvenes y con un nivel de estudios más alto.