Además de las inversiones generales para todas las islas en diferentes ámbitos, el proyecto de el Plan de Inversiones Estratégicas de Baleares 2030 incluye varias inversiones concretas en Ibiza y Formentera. En realidad son proyectos de los que ya se ha hablado en diferentes ocasiones y que ahora se reúnen en este plan. Entre ellas está promover un proyecto piloto de descarbonización de la conexión marítima entre Ibiza y Formentera o un plan de ordenación de los fondeos de todo el litoral formenterés.
También la reconversión de varias zonas turísticas maduras de las islas, entre las que se incluyen Sant Antoni y es Pujols, y el impulso de centros de formación profesional como la Escuela de Hostelería de Ibiza.
En el ámbito tecnológico, prevé la creación de un Centre BIT en Ibiza, para la «concentración empresarial, apoyo a la innovación y promoción de actividades creativas, tecnológicas y digitales».
En materia de transportes plantea la creación de un intercambiador modal en Vila para «minimizar el uso del vehículo privado y ofrecer a la ciudadanía una opción que facilite el acceso en transporte colectivo». En Formentera prevé la electrificación del parque móvil público, la habilitación de lanzaderas eléctricas a puntos de interés de la isla y la instalación de pérgolas fotovoltáicas sobre circunvalaciones y puntos de recarga, además de un sistema público de bicis eléctricas. Todo ello en el marco de Formentera.eco.
También contempla la adecuación de dos edicicios de sa Coma para acoger la Escuela Oficial de Idiomas y la Escuela Universitaria de Turismo e impulsar proyectos de sostenibilidad y energías nenovables tanto en el citado parque de servicios de sa Coma como en la zona del vertedero de Ca na Putxa.
