‘Stop global warming’ es el título de la original muestra colectiva y reivindicativa que pone en el foco de la atención del público el calentamiento global del planeta. La iniciativa surge de la artista local, Sol Courrèges, que tuvo la posibilidad de acceder a los restos de decenas de extintores, con la colaboración de una empresa de las Pitiusas. En su afán por dar una doble vida a los objetos aparentemente inservibles, Courrèges decidió tirar de agenda para proponer a otros artistas, hasta 28, que transformaran estos extintores inservibles en obras de arte.
A partir de ese momento la imaginación se disparó y el resultado es realmente sorprendente, por su originalidad, imaginación y por la variedad de visiones que se aportan a la hora de abordar uno de los problemas globales que sufre el planeta. Courrèges señaló que el único objetivo es que «con un extintor apagamos fuego, con muchos, el calentamiento del planeta». Además, el 25 % del precio de cada una de las piezas únicas irá destinado a la organización Greenpeace.
LA CLAVE
Calentamiento global
Una metáfora sobre el trato al planeta
A partir de bombonas de extintores en desuso, Sol Courrèges ha invitado a otros artistas a transformar esos recipientes en obras de arte que quieren abrir conciencias sobre el problema.
Entre las obras expuesta, que en su base son todo bombonas de extintores hay de todo: con ventanas que esconden historias, forrados de macramé, pintados con diferentes estilos y colores. Incluso hay creadores niños que también han participado y que dejan su huella en el resultado. Hay extintores más concienzudos que quieren reflexionar sobre el tiempo, la condición humana y la acción contra la naturaleza.
La exposición va más allá del espacio expositivo, el Centro Gabrielet, en Formentera, donde se puede ver hasta el 7 de octubre, ya que en las calles cercanas también aparecen extintores amarrados a las farolas con el mensaje del título de la exposición.
