Un incendio quemó ayer una extensión de 60 metros cuadrados de chatarra -en su mayor parte, vehículos desguazados- en las instalaciones del centro de reciclaje de Ca na Negreta, en la carretera que une Ibiza y Santa Eulària. Los bomberos recibieron la alarma del inicio del fuego a las 19.18 horas por parte de trabajadores del centro y pudieron controlar las llamas sobre las 23.40 horas de la noche. No se tiene constancia de que se haya producido ningún herido ni tampoco ningún intoxicado.
Según ha informado el Servicio de Bomberos a Diario de Ibiza, el fuego se inició en el almacén al aire libre del desguace, donde se encuentran los vehículos apilados y compactados convertidos en chatarra. Un trabajador de la zona ha señalado también que las llamas podrían haber sido originadas por una batería de teléfono que podría haberse colado entre los residuo. Pese a que antes de ser convertidos en chatarra se retira la gasolina y el material inflamable del interior de los vehículos, desde el servicio de Bomberos se ha explicado que usualmente suele quedar algún resto que ayuda a alimentar el fuego. El incendio afectó principalmente una pila de automóviles convertidos en chatarra y, durante las labores de extinción, una grúa ha ido retirando y separando los cubos de metal para facilitar el trabajo de los bomberos. Las llamas no han rebasado los límites del desguace en ningún momento.
Al lugar de los hechos se desplazaron quince efectivos del parque de bomberos y seis vehículos -dos camiones cisterna, dos bombas y dos vehículos ligeros-, a los cuales se añadieron cuatro cisternas más que aportó una empresa privada de suministro de agua. También se desplazaron hasta Ca na Negreta agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local.
El fuego se mantuvo activo durante cuatro horas y provocó una densa humareda que fue visible desde varios kilómetros
Mientras el incendio estuvo en activo, el Ayuntamiento de Santa Eulària realizó un llamamiento a los vecinos, a través de las redes sociales, para que cerrasen puertas y ventanas y así evitar intoxicaciones por el humo. También recomendó el uso de mascarilla para todas las personas vulnerables y a los menores de edad. El Ayuntamiento ha confirmado a Diario de Ibiza que no se ha tenido que evacuar a ningún vecino. La densa columna de humo fue visible durante horas desde varios kilómetros de distancia.
