El presidente de la Asociación de Náutica de la Petita i Mitjana Empresa d’Eivissa i Formentera (Pimeef), Ramón Díaz, advierte de que la que la competencia desleal que sufren el sector del chárter este verano incluso ha aumentado respecto a las temporadas pasadas. «Las empresas locales tienen que hacer frente a unos costes fijos muy elevados por los precios de los amarres, mientras que vienen del Levante a hacer la temporada, donde los precios son muy baratos, fondean en calas sin ningún coste», lamenta.
«En un fin de semana, en la zona de Sant Antoni se pueden encontrar fácilmente hasta 40 embarcaciones [de la zona del levante peninsular] haciendo embarques y desembarques», se resigna Díaz. En este sentido, reivindica mayor atención de las administraciones dado el peso económico de su sector, que «factura 550 millones de euros anuales en Balears». «Estamos hablando de 1.500 personas en trabajo directo e indirecto en Eivissa y Formentera», subraya.