La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé para este lunes en Baleares intervalos de nubes medias y altas tendiendo por la mañana a poco nuboso o despejado, y temperaturas nocturnas con pocos cambios y diurnas en descenso, notable en el norte de cada isla. El viento soplará del nordeste y este en el archipiélago. De esta forma, el termómetro podría dar un respiro después de una semana de calor tórrido, como se evidenció también ayer, día en que la Aemet mantuvo el aviso naranja por altas temperaturas en gran parte de las islas entre las 12 y las 19 horas.

El interior de Mallorca, el norte y el nordeste de la isla y la Serra de Tramuntana estuvieron en aviso naranja por temperaturas que rondaron los 40 grados. En situación parecida se encontraron Ibiza y Formentera, donde el mercurio rozó los 38 grados en las horas centrales del día. En Menorca, también en aviso naranja, el termómetro rondó los 37 grados.

Por su parte, el sur y el levante de Mallorca estuvieron en aviso amarillo por temperaturas de hasta 38 grados. Además, la Aemet situó a Menorca en aviso amarillo para el martes por fenómenos costeros con olas de hasta tres metros en el norte de la isla.

40 grados

Las localidades mallorquinas de Petra, Sineu y Escorca, así como Sant Antoni, en Ibiza, volvieron a alcanzar ayer los 40 grados centígrados de temperatura máxima, mientras se quedaron en 39 °C la Colònia de Sant Pere, Pollença, Binissalem, Llucmajor, Porreres, Sóller y Manacor.

Entre los registros más significativos de la jornada, recabados por el centro territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), figuran también los 38 °C de Campos, sa Pobla, Santa Maria y Sant Elm (Andratx). También es Mercadal alcanzó los 38 °C, y 36 °C en la Mola y Ciutadella.

En Ibiza, además de los 40 de Sant Antoni, se alcanzaron 37 °C en Sant Joan.

La ola de calor comenzará a remitir hoy, con la entrada de viento del norte y del nordeste de fuerza 4 a 6 de madrugada, que provocará «un marcado descenso de las temperaturas», de unos diez grados en el caso de las máximas, según la Agencia Estatal de Meteorología.

El viento traerá una masa de aire fresco que hará bajar las máximas, sobre todo en el norte de las islas, donde se situarán entre 28 y 30 °C, lo que contrasta con los valores de entre 37 y hasta 41 °C, alcanzados el fin de semana.

En Ibiza y Formentera, seguirán las máximas elevadas, pero también serán algo menos altas, con entre 34 y 36 °C.

El martes, se prevé que las máximas se queden entre 27 y 31 °C en Baleares.

Riesgo laboral

Desde una perspectiva laboral, el sindicato CCOO advirtió el fin de semana de la necesidad de que las empresas estén preparadas para afrontar este tipo de olas de calor. Consideró que estas situaciones deberían contemplarse en el Plan de Prevención de Riesgos Laborales.

«Los episodios de altas temperaturas son muy previsibles, se repiten cada año y afectan a las condiciones de trabajo. Por tanto, ¿por qué esperar al fenómeno meteorológico ‘ola de calor’ para establecer medidas básicas como asegurar sombras y aislamiento a fuentes radiantes; suministrar agua o bebidas isotónicas, y disponer de espacios donde refrescarse durante los descansos?», arguyó el sindicato en un comunicado.

Argumentó Comisiones Obreras que éstas son acciones que «pueden reducir la exposición al riesgo térmico y mejorar las condiciones de seguridad y salud de las personas trabajadoras».