De los 28,3 millones que recibirá la conselleria de Educación de Balears del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) a través de los programas de Cooperación Territorial del Ministerio de Educación y Formación Profesional, 22,5 irán destinados a la digitalización del sistema educativo.

De esta cantidad, casi 19 millones de euros se invertirán en aulas digitales, tres millones en dispositivos para alumnado vulnerable, y el resto en el Programa de refuerzo escolar PROA+, el financiamiento de libros de texto y material didáctico, y la creación de unidades de acompañamiento y orientación personal y familiar de alumnos en situación de vulnerabilidad.

Así lo comunicó el conseller de Educación y Formación profesional, Martí March: «Ha sido un elemento de política propia de la conselleria desde la pasada legislatura, pero una cuestión fundamental para llevar a cabo la empresa ha sido la aportación de los Fondos Europeos».

El objetivo principal es el de mejorar la conectividad de los centros educativos, en concreto la red wifi de éstos, que es una condición «sine qua non» para la efectividad de la transformación digital. También desde el curso pasado se ha puesto en marcha desde el Servicio de Normalización Lingüística y Formación, el CEP Ibsteam, que coordina la formación en competencias digitales de los centros educativos. Ahora, la administración prevé incrementar el número de personal cualificado del Ibsteam de nueve miembros a 16, que no sólo formarán al equipo docente, sino que también lo harán al alumnado y sus familias.

Martí March: «Lo que niego rotundamente es que no hayamos dialogado con los colegios concertados»

La gran parte de la inversión se la llevarán las aulas digitales, que estarán formadas por pantallas digitales interactivas, cámaras de documentos y cámaras fijas de aula y audio. Los complementos de las aulas variarán según el nivel educativo, los más avanzados contarán incluso con elementos de radio, chroma o steam. En total se estima que se podrá contar con 5.000 aulas digitales, que cubrirán al completo la demanda de todos los centros tanto público como concertados. «El objetivo final es que cada centro tenga su propio Plan de Formación adaptado a sus necesidades», dijo la directora general de Primaria Infantil, Innovación y Comunidad Educativa, Amanda Fernández.

«Hemos cambiado el modelo formativo de los docentes, ahora es un itinerario flexible donde se persigue conseguir un correcto uso técnico y la capacidad de crear contenidos por parte del profesorado», explicó la directora de Ibsteam, Yolanda Martínez.

En relación a la reciente polémica de la disconformidad de los centros concertados con la propuesta para la Reforma Educativa, March comentó que la actitud de la conselleria será siempre de tener «la mano abierta». «Enviamos la propuesta de ley a las asociaciones de los centros concertados con los nuevos cambios y nos dijeron que estaban satisfechos», puntualizó. «Lo que no entiendo de la reunión del viernes es cuáles son los puntos concretos donde hay discrepancia. Me gustaría que se separará la elaboración de la ley, que ha sido muy participada y aún no ha acabado, de las políticas educativas. De todas las quejas, no escuché ninguna estrictamente que hiciera referencia a la ley educativa», continuó. «Lo que sí niego rotundamente es que no hayamos dialogado, son con los que más lo hemos hecho realmente», concluyó el conseller.