Aunque no tienen nada que ver, para el Consell de Ibiza, en cuando a lo turístico se refiere, no hay diferencia entre un tipi cochambroso y una villa con todos los lujos. Son alquileres turísticos ilegales exactamente iguales. Así lo asegura el conseller insular de Territorio, que señala que todos ellos son espacios «que no se han dado de alta» y que ofrecen servicios de establecimiento turístico. «No hay diferencias», insiste el vicepresidente del Consell de Eivissa.
El conseller se refiere a estos alojamientos que aparecen en el apartado de «singulares» en los filtros de la plataforma Airbnb como «exóticos». Juan se lleva las manos a la cabeza al conocer que por algunos de estos zulos de apenas unos metros cuadrados y con baño compartido hay quien paga más de cien euros la noche. Apenas puede creerse que muchos de estos alojamientos turísticos tengan ya prácticamente un lleno completo durante el mes de agosto. En estos casos, sobre todo en los espacios que se encuentran en el campo, el conseller de Territorio reconoce que es más fácil y rápido «cuando se puede, actuar desde el punto de vista urbanístico en vez desde el turístico».
El conseller se refiere a tiendas de campaña, tipis, graneros y chozas como «alojamientos exóticos»
Para esto asegura que es «muy importante» la colaboración de los ayuntamientos. «Está claro que no puede haber un autobús en medio de una finca», indica el conseller, recordando cómo hace dos veranos el Ayuntamiento de Sant Joan, tras la denuncia de este diario, se personó en una finca cercana a Benirràs en la que se comercializaban como alojamientos turísticos tiendas de campaña, chozas, hamacas colgadas en los árboles y hasta un viejo autobús. ·«Esto es más rápido, pero no supone que se paralice la otra vía», destaca el conseller, que señala que ésta sería la vía para actuar en algunos de estos alojamientos turísticos ilegales y «exóticos».
