Tres dotaciones de bomberos del Consell de Ibiza con un total de doce efectivos trabajaron ayer para extinguir un incendio declarado sobre las 19.30 horas de ayer en Ca na Putxa. Según informó el conseller de Gestión Ambiental, Vicent Roig, el fuego, que se podría haber originado por la combustión de una bengala arrojada a la basura, no ha afectado a las instalaciones del vertedero.
El incendio quedó totalmente apagado a las 12 de la noche, han informado fuentes del Consell de Ibiza.
El incendio se produjo en la zona donde se almacenan las balas compactadas de basura de rechazo de la planta de transferencia, al arder una de ellas, y los primeros indicios apuntan a que la causa pudo ser la combustión interna de una bengala, señaló Roig, que añadió que ya han tenido «algún pequeño susto» dentro de las cintas de la planta de triaje con estos artefactos pirotécnicos que la gente arroja a la basura cuando están inservibles o caducados y que, en ocasiones, se han llegado a encender sin que el fuego prendiera. El incendio no ha afectado a la planta de transferencia ni a otras instalaciones, subrayaron desde el Consell.
Hasta la zona se desplazaron dos dotaciones de bomberos con diez afectivos a los que posteriormente se añadieron dos más y también se movilizaron Protección Civil, Guardia Civil y Policía Local de Santa Eulària. Durante la tarde de ayer, los medios aéreos del Ibanat actuaron también para refrescar el perímetro del incendio y evitar la extensión del fuego a las áreas boscosas cercanas. Operarios de la UTE Giref, que explota la planta de residuos de Ca na Putxa, trabajaron además removiendo la zona con la maquinaria para que se procediera a refrescarla. Los bomberos calculaban anoche que hasta la madrugada no podría darse el fuego por extinguido, aunque su perímetro ya estaba controlado.
Vecinos de la zona denuncian que se permita un vertedero a 150 metros de las casas y reclaman su clausura
El incendio provocó en la tarde de ayer una gran columna de humo negro, visible desde buena parte de la isla, que desató la alarma entre muchos vecinos. Precisamente, residentes en Cas Comodo, en Jesús, y Roca Llisa criticaron ayer, tras desatarse el fuego, que se permita la existencia de un vertedero «a 150 metros de las casas» y afirmaron que vienen denunciando desde el año 1994 esta situación al Govern balear, responsable del plan de residuos. Los vecinos también recordaron que «el tribunal de Justicia de la Unión Europea condenó al Reino de España por este vertedero en 2004», y volvieron a exigir la clausura de Ca na Putxa.
