Algunos lugares y monumentos de las Pitiusas, como el paseo de Vara de Rey de Ibiza, se tiñeron anoche de rojo en la celebración del Día Internacional del Síndrome KBG, enfermedad rara que afecta a dos niños de las Pitiusas, uno en Santa Eulària y otro en Sant Antoni, de los solo siete casos diagnosticados en Balears.

Las instituciones pitiusas colaboraron en hacer visible esta enfermedad a través de las redes sociales en alguna de las campañas lanzadas. Estas campañas consisten en la difusión a través de redes de un vídeo realizado por la Asociación Española de Síndrome KBG para dar a conocer esta condición bajo el título ‘Atrapa el globo’ y que se encuentra disponible en YouTube. Igualmente se puede colaborar difundiendo vídeos o fotos portando una pieza de ropa roja y un mensaje de apoyo a los afectados por KBG. Todo ello adjuntando las etiquetas #HazvisibleelKGB y #HoyVoyDeRojoPorKBG.

El pasado 15 de abril se constituyó la Asociación Española de Síndrome KBG que cuenta con 36 socios

El KBG es una condición caracterizada por un rostro característico, los incisivos centrales superiores grandes (macrodoncia), anomalías esqueléticas (principalmente en las costillas y en las vértebras) y atraso del desarrollo, físico e intelectual. Además, los afectados pueden presentar gran número de alteraciones, como problemas cardiacos, déficit auditivo o problemas de comportamiento (como, por ejemplo, baja tolerancia a la frustración).

El síndrome es una enfermedad rara causada por mutaciones en el gen ANKRD11, cuya proteína se encuentra en las neuronas. Como síndrome de origen genético no tiene cura pero se pueden tratar las manifestaciones del mismo y vigilar aquellos aspectos necesarios para prevenir posibles problemas y mejorar la calidad de vida e independencia de los afectados.

El 15 de abril se constituyó la Asociación Española de Síndrome KBG que cuenta con 36 socios que presentan dicha condición, si bien el número total de personas diagnosticada se estima que supera el medio centenar.

Dar a conocer este síndrome resulta relevante para la Asociación por diversos motivos. Por un lado, ayuda a normalizar la situación de los afectados y estimula la solidaridad de quienes se relacionan con ellos que podrían interpretar algunos de sus comportamientos de forma errónea. También permite despertar el interés de los especialistas médicos por esta ‘enfermedad rara’ y, por lo tanto, poco conocida y poco atrayente para muchos investigadores.

Por último, dar a conocer la enfermedad y la Asociación que ha surgido para englobar a los afectados puede servir para que familias con personas diagnosticadas puedan acceder a una comunidad en la que pueden compartir sus dudas, aprender de la experiencia ajena y conocer cómo abordar problemas que puedan surgir en la relación con las administraciones sanitarias para recibir los tratamientos necesarios o acceder a posibles ayudas por discapacidad y dependencia.