Cerca de un centenar de vehículos salieron ayer a la calle, a través de una marcha motorizada por Palma, para reivindicar los derechos de los empleados en el 1 de mayo, Día Internacional del Trabajador. Una manifestación que los sindicatos de UGT y CCOO arrancaron en el Hipódromo de Son Pardo, donde, a pesar de la lluvia, se reunieron los ciudadanos para protestar frente a la precariedad laboral. «Estamos muy contentos de salir a la calle y alzar la voz para que se cumplan los derechos de los trabajadores», afirmó Lorenzo Navarro, secretario general de UGT en Balears

Con motivo de las restricciones, la manifestación se tuvo que realizar de manera motorizada, por lo cual los sindicatos y trabajadores marcharon con sus vehículos desde el Hipódromo hasta el Moll Vell, entre pitos y proclamas. «La crisis sanitaria se ha transformado en una recesión económica. Por ello, los empleados deben salir de esta crisis de una forma mucho más justa que en la anterior del 2008», aseguró José Luis García, secretario general de CCOO en las islas

Desde otra perspectiva, los sindicatos apuntaron hacia el Gobierno Central y sus promesas: «deben cumplir y derogar la reforma laboral, subir el salario mínimo y eliminar la reforma de pensiones de 2013». El acto finalizó en el teatro de Comisiones Obreras con la presencia del alcalde de Palma, José Hila, y la consellera Mercedes Garrido, entre otros.

Armengol lanza su apoyo

La presidenta del Govern agradeció el compromiso de los trabajadores en el «año más difícil» por la pandemia. A través de un mensaje en Twitter, recordó que «proteger lugares de trabajo y prestaciones, reforzar el Estado del Bienestar, ampliar el escudo social y laboral: es el objetivo del Primero de Mayo siempre, también ante la covid». «Gracias a todos los trabajadores, vuestro compromiso nos acerca a la meta», concluyó.