El presidente del Sindicato Médico de Balears (Simebal), Miguel Lázaro, alertó ayer, ante la Comisión de Salud del Parlament, de que «faltan 350 médicos» de Atención Primaria en las islas, y llamó a evitar el «éxodo» de profesionales a otros territorios, pidiendo medidas de fidelización.

«La Primaria está a punto de entrar en la UCI». Con esta metáfora el presidente del sindicato médico, que fue llamado a la Comisión para exponer propuestas de mejora para la sanidad balear, instó a los diputados a tomar medidas. «Les corresponde a ustedes», les interpeló.

Entre otras cuestiones, Lázaro pidió «iniciar la operación retorno» de facultativos y urgió a tomar medidas para que se queden en Balears los 500 residentes que se están formando en el archipiélago.

En este sentido, Miguel Lázaro denunció que mientras se están invirtiendo recursos en formar médicos que después se marchan, se están contratando profesionales con títulos no homologados para paliar el déficit de médicos.

Para fidelizar a los profesionales, Simebal plantea diferentes actuaciones, como equiparar el plus de insularidad al que cobran los profesionales de Canarias, aprobar un convenio colectivo para los médicos residentes y, fundamentalmente, mejorar las condiciones laborales.

Jornadas de 48 horas semanales

Sobre esto, Lázaro destaca que los médicos tienen jornadas semanales de 48 horas, frente a las 37,5 de otros funcionarios; reclama una mejora de salarios y alerta de la excesiva temporalidad, la sobrecarga de trabajo y de discriminación a médicas con medidas de conciliación, entre otras cuestiones.

Asimismo, en el marco de la pandemia pide que se considere a los médicos como personal de riesgo, remarcando que en España han muerto 118 médicos por coronavirus. «¿Cuántas categorías han puesto sobre la mesa 118 vidas?», se preguntó

Reclaman «iniciar la operación retorno» de facultativos y arbitrar medidas para que se queden los 500 residentes que se están formando en las islas

Por otro lado, otras propuestas de Simebal son fomentar que médicos senior sigan trabajando, un plan de inversiones tecnológicas, la ampliación de quirófanos, la renovación de equipamientos, aumentar los recursos sociosanitarios y de salud mental y mejorar los cuidados paliativos.

Deuda sanitaria histórica

El presidente de Simebal reconoció que todas estas actuaciones «si no hay financiación son más deseo que realidad». Sobre esta cuestión planteó diversos aspectos, comenzando por la «deuda sanitaria histórica» derivada de la transferencia de competencias desde 2002.

Simebal ha cifrado esta deuda en 2.800 millones de euros y ha instado a los diputados del Parlament a a que la reclamen a Madrid. En este punto, Lázaro recalcó que el 42% de los ciudadanos han elegido tener un seguro privado. «¿Se imaginan que no hubiera, qué pasaría?», se preguntó.

Finalmente, propuso mejorar la financiación a través de la facturación a extranjeros -según indicó, no todo ese dinero se queda en Balears- e implantando una ‘ecotasa sanitaria’ ya que los turistas «consumen recursos sanitarios».

Igualmente, reivindicó la dotación del Régimen Especial de Baleares (REB).