El británico acusado de matar a otro compatriota en julio de 2018 en Ibiza ha ingresado en prisión provisional comunicada y sin fianza al existir «riesgo de fuga», según se establece en el auto de prisión dictado el pasado 23 de marzo por el juzgado de Instrucción número 1 de las Pitiusas.

M.A.L., acusado de causar la muerte a otro joven británico, H.J.K., en un piso de Sant Antoni, ha admitido que entre ambos se produjo un forcejeo, provocando la muerte tras propinarle un golpe.

Ante la «gravedad» de las penas, asegura la magistrada, se eleva «exponencialmente la probabilidad de fuga»

La magistrada destaca en el auto que el acusado de homicidio ha cumplido «escrupulosamente» las cautelas y obligaciones impuestas, «acudiendo diligentemente a presencia de este juzgado siempre que ha sido requerido par ello».

De 18 a 25 años

Aún así, la jueza estima que actualmente existe «peligro de que el investigado pueda abstraerse a la acción de la justicia». En este sentido, señala que tanto la Fiscalía como la acusación particular han determinado ya las penas solicitadas, concretamente 18 y 25 años de prisión por la comisión de un delito de asesinato, respectivamente.

Ante la «gravedad» de estas penas, continúa la magistrada, se eleva «exponencialmente la probabilidad de fuga» y resalta que se agrava con el «riesgo de que el juicio en su día no pueda celebrarse en presencia de M.A. L. debido a la salida de Reino Unido de la Unión Europea, y la consecuente inoperatividad de los múltiples instrumentos de cooperación existente en el ámbito de la Unión Europea».

El agresor ha ingresado en prisión provisional comunicada y sin fianza al existir «riesgo de fuga»

En otro punto del auto de prisión provisional, la jueza justifica que, con la investigación «prácticamente concluida», se prevé «en breve» su remisión para celebrar el juicio.

Los hechos ocurrieron el 17 de julio de 2018 en un piso ubicado en la plaza de s’Era d’en Manyà, en el núcleo urbano de Sant Antoni. Varias personas se estaban peleando en una vivienda cuando un joven accedió a ella para intentar detener la trifulca. Cuando intervino, la víctima se llevó varios puñetazos.

El agresor, por su parte, huyó por el balcón del segundo piso de la vivienda en la que se encontraban, pero finalmente fue detenido a la altura de la rotonda de la entrada de Sant Antoni, conocida como la del Huevo de Colón, por la Policía Local.