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Sucesos

Un ibicenco, entre los procesados por un alijo de 600 kilos de coca encontrado en un velero con destino a Baleares

La Guardia Civil abordó la embarcación frente a la costa de Málaga desde el buque oceánico 'Río Segura' con apoyo de medios aéreos

Los 600 kilos de cocaína incautados, en la Comandancia de la Guardia Civil de Palma. PERE JOAN OLIVER

Un juez de Palma ha procesado a nueve personas por su vinculación con un cargamento de 600 kilos de cocaína de gran pureza destinados a Baleares y valorados en unos 20 millones de euros, uno de los mayores alijos intervenidos en los últimos años. La droga fue interceptada por la Guardia Civil en las costas de Málaga en mayo de 2019 en un velero procedente del Caribe y cuyo destino era el archipiélago. El magistrado considera que existen indicios contra los sospechosos por delitos de tráfico de drogas, organización criminal y falsedad documental. Además, acuerda mantener en prisión provisional a cinco de los sospechosos y fija en 26 millones de euros la fianza que deben aportar para hacer frente a las posibles multas.

El titular del juzgado de instrucción número 7 de Palma sostiene en un acto que los acusados se asociaron para traficar con grandes cargamentos de drogas e introducirlos en España a través de embarcaciones. El magistrado detalla que la organización trasladó un velero llamado Kayros desde España al Caribe. Allí habría aprovechado la celebración de diversas regatas para camuflar su verdadera actividad. En un doble fondo construido en la popa de la embarcación ocultaron 600 paquetes con un kilo de cocaína cada uno y una pureza del 72 por ciento.

El barco pasó por la isla de Martinica y emprendió el viaje de regreso a Balears con dos personas a bordo, un ibicenco y un lituano. Los documentos del velero habían sido falsificados para simular que era de pabellón inglés.

El juez mantiene en prisión a cinco de los acusados y pone en busca y captura a otro que ha huido

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El velero fue interceptado en una gran operación de la Guardia Civil en el último tramo de la travesía, cuando navegaba frente a las costas de Málaga. A mediados de mayo de 2019, varias embarcaciones y medios aéreos participaron en un operativo para abordar el barco. El Kayros fue llevado a tierra, donde se encontró el escondite de la droga, y los dos tripulantes quedaron detenidos. Ingresaron en prisión poco después por orden judicial.

Los investigadores del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil de Balears mantuvieron abierta la investigación para desmantelar completamente la organización de narcotraficantes. Durante los meses posteriores y con autorización judicial, los agentes llevaron a cabo diversas escuchas telefónicas y otras diligencias. La banda había organizado nuevos envíos de drogas, pero la pandemia alteró sus planes. Estas pesquisas culminaron el pasado mes de septiembre, cuando se llevó a cabo la segunda fase de la ‘Operación Rabbit’. Fueron arrestadas otras siete personas en Mallorca, Eivissa, Alicante y Málaga por financiar y organizar el transporte de grandes cargamentos de cocaína desde Sudamérica a Balears. Los investigadores bloquearon numerosas cuentas corrientes e intervinieron diversos bienes muebles e inmuebles.

Fianzas millonarias

El magistrado expone en el auto que las investigaciones apuntan a presuntos delitos de tráfico de drogas, organización criminal y falsedad documental, penados en total con hasta 17 años de cárcel. El juez procesa por estos delitos a los nueve investigados, uno de los cuales está fugado de la Justicia y sobre el que pesa una orden internacional de busca y captura.

Además, acuerda mantener en prisión provisional a cinco de los sospechosos y fija fianzas de 26 millones de euros por cabeza para hacer frente a las posibles multas que deberán abonar en caso de condena.

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