De regreso a Ibiza. El velero ‘Pola’ regresaba el domingo de Formentera a Ibiza cuando se le rompió el motor. El propietario, teniendo en cuenta la situación en la que se encontraba, llegó como pudo a la playa de es Cavallet, y dejó varado allí el barco, que tiene unos ocho metros de eslora. El temor del armador es que el viento y las olas acaben causando daños importantes en el barco antes de que pueda reflotarlo.