El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Santa Eulària llevará a pleno que se celebrará el próximo jueves la aprobación de la suspensión temporal durante este verano de la ordenanza que regula la paralización de obras en el periodo estival.

Se permitirán los trabajos de este tipo siempre que no se encuentren en las proximidades de establecimientos turísticos en funcionamiento o si, por su tipología, pueden suponer molestias importantes a los vecinos.

Del 1 de mayo al 15 de octubre. Este año no se aplicará la suspensión de forma general en todo el territorio a partir del 1 de mayo y hasta el 15 de octubre, según se contempla en la ordenanza de Santa Eulària.

De este modo se quiere impulsar la actividad económica y la ocupación ligada a la construcción, de forma que se pueda compensar en cierta medida la bajada del sector turístico por la crisis derivada del coronavirus. Igualmente, se favorece a los negocios que necesiten reformas para poder adaptarse a la nueva situación o hacerse más competitivos, de manera que pueden aprovechar el parón forzoso al que obliga la emergencia sanitaria. El año pasado ya se realizó una suspensión similar, aprobada en pleno por unanimidad.

No se eliminan requisitos

La propuesta no representa relajar la vigilancia y el control o permitir cualquier actividad constructiva favoreciendo posibles abusos. No se eliminan requisitos, como que la obra tenga todos los permisos que le correspondan y que cumpla con las medidas de seguridad, sino que simplemente no se aplicará la suspensión de forma general en todo el territorio a partir del 1 de mayo (y hasta el 15 de octubre, según la ordenanza). Se permitirá la continuidad de los trabajos mientras en las cercanías no haya negocios turísticos abiertos.

Contempla la paralización de obras en determinadas zonas aunque inicialmente se haya permitido seguir los trabajos

Según se asegura desde el Consistorio, se analizarán las circunstancias en cada caso y, de hecho, la propuesta que se lleva a pleno contempla la posibilidad de aplicar la paralización de obras en periodo estival en determinadas zonas u obras aunque inicialmente se haya permitido seguir los trabajos.

Esto se podrá producir en caso de que finalmente un establecimiento turístico abra en la zona de influencia de las obras o porque se modifique el tipo de trabajo que se realice y dicho cambio pueda implicar molestias serias a los vecinos.