El Ayuntamiento de Ibiza quiere fomentar rutas turísticas por los comercios tradicionales «que fomenten los valores locales», así como los mercados y espacios emblemáticos. Esta es una de las actuaciones que prevé el plan estratégico de turismo de Vila 2021-2023, que ha costado 14.460 euros y se marca cumplir con los 17 objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030 de la ONU.
El Ayuntamiento presentó ayer este plan, elaborado por la consultora Braintrust, para que sirva de «hoja de ruta donde fijar el desarrollo turístico» y que permita «conocer las debilidades y la fortaleza» del municipio como destino, destacó en un comunicado. De momento, el Consistorio ha avanzado un listado de declaraciones de intenciones, que conforman los 21 objetivos que vertebran este plan.
Entre ellas, figuran retos como aumentar el gasto medio del turista, diversificar su perfil, reducir su impacto ambiental, incrementar el patrimonio y la cultura en la imagen de marca de la ciudad o promover «la diversificación y la promoción de la transversalidad turística en la economía creando nuevas oportunidades de negocio».
Vila ha mantenaido 18 encuentros con representantes de más de 50 colectivos para la elaboración del plan
También se expresa la voluntad de prolongar la apertura de establecimientos y la ocupación laboral más allá de la temporada turística, así como mejorar la formación de los trabajadores del sector turístico o aprovechar las nuevas tecnologías para avanzar«hacia un destino de turismo inteligente».
El alcalde, Rafa Ruiz, apunta en el comunicado que la pandemia del covid «obliga a repensar las acciones» y analizar de qué manera «se pueden diversificar los productos». «El turismo es un sector clave para la reactivación económica, social y estratégica, dentro del sistema productivo de la ciudad».
Por su parte, la concejala de Turismo, Dessiré Ruiz, destaca que el plan se ha elaborado a partir de 18 reuniones mantenidas con 50 representantes de diferentes colectivos de Eivissa.
