Agentes de la Policía Local de Santa Eulària han propuesto este fin de semana la sanción a una veintena de personas que participaron en tres reuniones de no convivientes, infringiendo la normativa para combatir la expansión del coronavirus, han informado desde la Comisaria a través de un comunicado.

En uno de los encuentros se levantó también un acta por molestias de ruidos y los agentes constataron que se estaba celebrando una fiesta con música que trascendía al exterior y originaba molestias a los vecinos.

En el primero de los servicios se impusieron 10 sanciones a jóvenes que participaban en una fiesta en la madrugada entre el sábado y el domingo. Sobre las 00:20 horas de ayer, día 31 de enero, se recibió aviso alertando de la posible celebración de una fiesta con numerosos asistentes en la zona de Can Musson.

Al acudir al lugar que apuntaba el alertante, los agentes pudieron comprobar la presencia de numerosos vehículos en el exterior de una vivienda y que en el interior de la casa había una decena de personas.

Las personas del interioir de la vivienda no abrieron las puertas a los agentes para su identificación. Tras varias gestiones con la propiedad de la vivienda, la decena de personas que estaban en el interior accedieron a salir y la policía pudo proceder a su identificación.

La fiesta fue paralizada en ese momento y todas las personas abandonaron el lugar.

Las otras dos intervenciones tuvieron lugar la noche pasada. La primera se produjo en la calle Pasaje d'en Ros de la población de Santa Eulària sobre las 22:15 horas. Un vecino de la citada vía alertó sobre la presencia de personas reunidas en una casa debido al volumen de ruido que salía de su interior.

Cuando la patrulla llegó al lugar pudo comprobar cómo, efectivamente, la música procedente del piso era tal que incluso dificultaba el mantener una conversación a un tono normal, han asegurado a través de un comunicado.

Inmediatamente los agentes se dirigieron a los ocupantes de la casa, les obligaron a apagar la música y se identificó a las seis personas asistentes, no siendo todas ellas convivientes.

Apenas una hora después, sobre las 23:20, llegaba otro aviso por molestias en una vivienda en la calle del Mar, también de la población de Santa Eulària. En este caso no se constataron molestias de ruido pero sí que se comprobó que sólo dos de las cuatro personas reunidas eran convivientes, motivo por el que se levantó acta contra todos los presentes.