La exvicepresidenta primera del Consell y portavoz del grupo de Unidas Podemos, Viviana de Sans, asegura que se le ponen «los pelos de punta» al constatar ahora la forma cómo la exvicepresidenta segunda y exsocia de gobierno Marta Díaz gestionó en el pasado mandato la empresa pública Ferias y Congresos de Eivissa (Fecoev) y la pasarela de moda Adlib, según lo que apunta la auditoría encargada por el actual equipo de gobierno.
De Sans puntualiza que, pese a ser miembro del consejo de administración de Fecoev, no ha tenido acceso a la auditoría, pero destaca que si se confirma lo publicado por este diario, el equipo de gobierno (PP y Ciudadanos) debe denunciarlo, si jurídicamente procede, «a la Fiscalía Anticorrupción o adonde corresponda y llegar hasta las últimas consecuencias».
El expresidente y portavoz del grupo del PSOE, Vicent Torres, rehusó manifestarse sobre las informaciones de este diario hasta que pueda ver personalmente la auditoría. «Hemos pedido una copia. No sabemos qué dice», se limitó a decir Torres, que, eso sí, indicó que, según su criterio, «se hizo todo de forma legal» y recordó a Diario de Ibiza que el entonces conseller de Hacienda Gonzalo Juan también controlaba los gastos de la empresa pública.
Por la tarde, Vicent Torres publicó a través de las redes sociales que «el anterior gobierno del Consell hizo en cada ejercicio una auditoría externa de Fecoev» y criticó «la transparencia de PP y Ciudadanos» por no haberle pasado una copia de la auditoría. También les animó a que «investiguen absolutamente todo lo que consideren de las legislaturas anteriores». «Soy el primero que quiero la máxima transparencia y claridad en la gestión de los recursos públicos, gobierne quien gobierne. Lo mismo les pido a PP y Cs en la tramitación de sus contratos», dejó escrito.
«Falta de ética y estética»
«Falta de ética y estética»
La portavoz de Unidas Podemos sostiene que lo que más le «asombra» es «el poderío» de Marta Díaz «de firmar todos los gastos y hacerse responsable única de todo». «Se me ponen los pelos como escarpias. En mi caso, no firmaba absolutamente nada que no estuviera avalado por los técnicos. Para mover un bolígrafo... por pequeño que fuera el gasto debía llevar una justificación. Nosotros fuimos superpulcros con estas cosas», subraya.
Por ello, la excompañera de gobierno de Marta Díaz expresa su «enfado» porque estas cosas «tapan el buen trabajo que se hizo en el pasado mandato, en el que en transparencia se pasó de cero [porque no se había hecho nada hasta entonces] a 100», indica De Sans, al tiempo que recuerda que «la primera tanda» de informaciones publicadas por este diario sobre el escándalo de los gastos de representación de Marta Díaz «ya fue tremendo», al menos, destacó, por «la falta de ética y estética».
Como publicó este diario, Díaz cargó gastos de peluquería, gasolina a pesar de que no tiene carné de conducir, y dos entradas de cine con la tarjeta institucional. No los justificó, por lo que los tuvo que pagar posteriormente de su bolsillo al principio de este mandato.
En total, la exvicepresidenta tuvo que devolver casi 3.000 euros. Aparte, tal como publicó este diario, Díaz sí pasó al Consell la compra de una crema para el cuerpo Guerlain, de 44,50 euros, que adquirió en el aeropuerto Orly de París. Por todo ello, Díaz se vio forzada a romper con el PSOE e inicialmente anunció que dejaba su acta de consellera, pero posteriormente dio marcha atrás y, en contra de la posición del que había sido su partido, decidió seguir en el Consell para «defenderse», justificó.
La estilista se desvincula
La estilista se desvincula
La estilista Laura Furné, a la que el Consell encargaba el maquillaje y peinado de las modelos Adlib, contactó ayer con este diario para desvincularse de todo este asunto y lamentar «el perjuicio» que le está causando. «No tengo nada que ver con todo esto. Me dedico a mi trabajo y he atendido con profesionalidad lo que me ha encargado la Administración», dijo, al tiempo que aclaró que Marta Díaz es una cliente y que desconocía si la tarjeta con la que pagó el 11 de mayo de 2018 era suya o de la institución.
Asimismo, De Sans asegura que «desconocía» cómo su entonces compañera de gobierno gestionaba la empresa pública y la moda Adlib. La portavoz de Unidas Podemos asegura que, en su día, «se cuestionó» a los socios de gobierno del PSOE el incremento del gasto de Adlib.
«Nos dijeron que estuviéramos tranquilos que no había ningún gasto que no estuviera justificado», recuerda De Sans, que añade que sus socios de gobierno les presentaban los informes con «las cifras de retorno, con el impacto de Adlib sobre los medios de comunicación y el mundo de la moda, con los que se justificaba el incremento del presupuesto».
La portavoz de Podemos indica que «se respetaba» el trabajo que hacía cada conselleria y apunta que el sector de la artesanía, que era un objetivo de gobierno, «subió mucho» con la moda Adlib, pero cuando empezaron a tener «dudas» por los «tipos de gasto que ella misma [Díaz] publicaba por las redes sociales se habló seriamente» con el PSOE. «Y confiamos con sus explicaciones, las del retorno que se conseguía con Adlib», reitera.
