Las quejas vecinales por fiestas en la villa de la zona de Ca na Negreta que ya fue denunciada el mes pasado por parte de la Policía Local de Santa Eulària van en aumento. «Se ven llegar muchos coches y a mucha gente que entra en la casa, y se escucha música muy alta hasta muy tarde», advirtió ayer uno de los vecinos, que consideró «incomprensible» que se pueda «tolerar algo así en plena pandemia».

Desde el Ayuntamiento de Santa Eulària explicaron ayer que el expediente contra el presunto organizador de la fiesta, que los agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil impidieron que se llevara a cabo el pasado 8 de octubre, «continúa en marcha». Entonces los agentes multaron a una treintena de asistentes al sarao.

Santa Eulària explicó ayer que los agentes locales vigilan esta zona de Ca na Negreta, sobre todo cuando se reciben llamadas de los vecinos. Para ello, la Policía Local realiza pruebas de alcoholemia a los conductores que pululan por el lugar y vigila el posible tráfico de drogasque pueda llevarse a cabo, pero el Ayuntamiento remarcó que no puede entrar en el interior de la casa sin una orden judicial. Por otra parte, según ha podido saber Diario de Ibiza, el propietario ha denunciado a su inquilino, ya que, al parecer, en el contrato se consigna que no se pueden organizar fiestas en la vivienda.

Fiesta muy organizada

Fiesta muy organizada

El 8 de octubre, sobre la medianoche, los agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil comprobaron que en esta casa se preveía la asistencia de decenas de personas, para lo cual se contaba con servicio de seguridad privada, un pinchadiscos, vehículos de transporte privados y servicios de taxi mediante ubicaciones enviadas por WhatsApp.