El Banco de Restos de Especies Insulares (BREI) atesora 2.242 muestras genéticas, de plumas, esqueletos y otros elementos de especies protegidas de las islas, destinados a la investigación científica y la educación ambiental, entre ellos 12 esqueletos completos de águila perdicera.

El dato lo difundió ayer la conselleria de Medio Ambiente y Territorio con motivo de la presentación del primer esqueleto completo de águila perdicera (Aquila fasciata) montado por científicos del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (Imedea) para que se exponga con fines científicos y educativos en el CofibB.

Técnicos del Consorcio para la Recuperación de Fauna Salvaje (Cofib) han recibido este martes el esqueleto de águila perdicera, en posición anatómica dinámica, que es el primer montaje de estas características realizado con restos de huesos provenientes del Cofib.

La donación ha sido posible gracias a la colaboración Cofib e Imedea. Por un lado, el Servicio de Protección de Especies ha cedido los huesos del Banco de Restos de Especies Insulares (BREI) al Imedea, que ha incorporado estos restos a su colección osteológica de pájaros que, en la actualidad, cuenta con más de 2.500 ejemplares.

Actualmente este centro de investigación ha puesto en marcha un proyecto de reconstrucción de esqueletos de diferentes especies animales, para poder ilustrar el funcionamiento de sus estructuras de sostenimiento. Es en este contexto que se enmarca el montaje del esqueleto que quedará en las instalaciones del COFIB con finalidad científica y de educación ambiental.